Criminales lograron escapar de la PNP por demora en descerraje

Es 10 de junio pasado, distrito de San Martín de Porres. Diversas cámaras de seguridad captan el desplazamiento de un camión que viene desde un almacén en el Callao, lleno de repuestos para autos, valorizados en más de 100 mil dólares.

El camión corta camino por una calle. Es en ese instante que entra en escena una banda criminal especializada en el robo de camiones que trasladan mercadería desde el Puerto del Callao. Una banda que utiliza por lo menos seis vehículos y una moto en sus asaltos.

En solo 30 segundos se produce el secuestro del chofer y del camión. Bajan al chofer del camión y lo suben a uno de los vehículos, mientras uno de los delincuentes toma el volante. Parten, llevándose al chofer y al camión que traslada más de 100 mil dólares en mercadería.

La violencia, sin embargo, no ha terminado. El agente de seguridad que resguarda el camión es embestido por un auto, cae al piso y un delincuente armado lo conmina a subir al auto. El agente se arroja al piso, intenta evitar que lo secuestren, pero es en vano. Otro sujeto baja y lo sube a un vehículo. Dejan abandonada la moto y parten junto al resto de la banda.

Unos 16 días después, el 26 de junio, nuevamente los mismos delincuentes del Callao utilizando los autos y la moto van a la casa de un nuevo camión. El escenario es la avenida Faucett, muy cerca al cruce con Morales Duárez. El objetivo: un camión con mercadería que supera los 150 mil dólares.

Con todas estas imágenes, los agentes de la División de Investigación de Alta Complejidad (Diviac) y la Dirección General de Inteligencia del Ministerio del Interior (Digimin) lograron identificar a cada uno de los delincuentes que integraban esta banda criminal, todos eran del Callao, específicamente de la zona del asentamiento humano Sarita Colonia.

Meses de un minucioso seguimiento permitieron a los agentes de la Diviac y la Digimin identificar cada movimiento de los miembros de esta banda criminal.

Esta semana, la policía y la fiscalía fueron por ellos, al corazón del asentamiento humano Sarita Colonia en el Callao. Durante el operativo, fuimos testigos de cómo afecta, a la lucha contra estas bandas criminales, los cambios hechos desde el Congreso. Los registros de las viviendas e incautaciones no se pudieron realizar hasta la llegada de defensores públicos, de abogados que llegaron muchas horas después.

La demora en el descerraje ordenado por el juez permitió que dos avezados delincuentes, escapen en pleno operativo.

Esta fotografía tomada en la puerta de un almacén en el callao describe como aun quedan en libertad otros miembros de esta banda cuya captura será inminente. Ya están identificados.