Papa Francisco pidió perdón por subestimar escándalo de abusos sexuales en Chile

“El día que me traigan una prueba contra el obispo Barros ahí voy a ver. No hay una sola prueba en contra. Todo es calumnia. ¿Está claro?”. Esta fue la férrea defensa del papa Francisco a favor del obispo de Osorno, Juan Barros, pese a estar sindicado como encubridor de los abusos sexuales cometidos por el exsacerdote Fernando Karadima.

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Pero las críticas fueron tantas que poco tiempo después de culminar su visita a Chile, envió a dos emisarios para recabar información.

Ahora, a través de una carta, leída por el monseñor Fernando Ramos, el santo padre reconoció haber cometido errores. Pidió pruebas y tras la llegada de sus enviados a Chile, al parecer las consiguió.

“En lo que me toca, reconozco y así quiero que lo transmitan fielmente, que he incurrido en graves equivocaciones de valoración y percepción de la situación, especialmente por falta de información veraz y equilibrada”, narró la carta del santo padre.

Una conclusión a la cual llegó tras leer el informe elaborado por sus enviados, luego de escuchar la terrible experiencia vivida por cada una de las 64 víctimas que decidieron hablar con transparencia sobre su verdad.

En la misiva el sumo pontífice también invitó a Roma, a los 32 miembros de la Conferencia Episcopal chilena para que puedan conocer su decisión sobre el futuro de Juan Barros y elaborar medidas para que hechos como estos no se repitan.

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En 2010 la justicia Vaticana suspendió de por vida al sacerdote Fernando Karadima, al encontrarlo culpable de abusar sexualmente de niños y adolescentes. Sin embargo a pesar de ello, la justicia ordinaria no lo condenó porque los crímenes ya habían prescrito.