Dios está con el Perú, afirma el Cardenal Carlos Castillo

El cardenal Carlos Castillo, arzobispo de Lima y primado del Perú, dirigió un mensaje lleno de gratitud y esperanza hacia todos los cristianos católicos del país, agradeciendo su compañía y oración en los últimos días.

En su discurso, destacó la importancia del tiempo de Adviento y la cercanía del inicio del "Año Jesucristo", que se inaugurará en la diócesis de Lima el 29 de diciembre, coincidiendo con el inicio global del 24 de diciembre, en la noche de Navidad. 

Mensaje de paz

El arzobispo alentó a los peruanos a enfrentar los desafíos del país con sensibilidad hacia el sufrimiento de los demás y a promover la paz y la concordia.

Reconoció las dificultades que vive el Perú, pero reafirmó la fe en que Jesús puede obrar milagros de unidad y reconciliación. "La vida está hecha para amar, para ser felices y construir juntos", expresó. 

Castillo hizo un llamado a la reflexión, invitando a los fieles a afrontar las dificultades del país con paz, sensibilidad y comprensión hacia el sufrimiento de los demás.

Subrayó la importancia de la conversión personal, recordando que aquellos que causan daño a otros se hacen daño a sí mismos, y que la vida tiene como propósito el amor, la felicidad y la construcción de una sociedad más justa.

En este sentido, citó el ejemplo de Jesús, quien, a pesar de las dificultades y maldades humanas, entregó su vida por la humanidad, enseñando el perdón y el amor incondicional. 

El cardenal también compartió con alegría el hecho de que, durante la misa de la Inmaculada Concepción, tuvo la oportunidad de acompañar al Santo Padre, quien quiso que él estuviera junto a los celebrantes principales en una ceremonia de gran significado.

En ese marco, resaltó el histórico rol de Lima como un centro de tradición católica en América Latina y, especialmente, la responsabilidad de los más antiguos primados de países como Perú y Argentina en la historia de la fe católica. 

Finalmente, el cardenal Castillo compartió su bendición con todos, pidiendo que el Año Jubilar, el cual permitirá a todos acercarse a Jesucristo, sea un momento de milagros de paz, concordia y justicia, especialmente para los más necesitados y vulnerables.

En su mensaje, también recordó su reciente nombramiento como cardenal, siendo el sexto cardenal en la historia del Perú. Como miembro del colegio cardenalicio, tiene la posibilidad de participar en la elección del próximo Papa, lo que refuerza su papel en la Iglesia global.