Hoy:

    Exgerente de la Municipalidad de Pisco es acusado de feminicidio

    Sandro Almeyda López, exgerente de la Municipalidad de Pisco, es investigado por la muerte de su pareja. La familia de la víctima descarta que Milagros Breña se haya quitado la vida

    Exgerente de la Municipalidad de Pisco es acusado de feminicidio - Foto y video: América Noticias

    En Chincha, familiares y amigos de Milagros Breñas Flores exigen justicia por su extraña muerte. Ella apareció colgada con una correa en la casa de su pareja, tenía además múltiples moretones en el cuerpo. Todos señalan que no se trataría de un suicidio sino de un feminicidio. La fiscalía abrió investigación contra su pareja, el exgerente de la Municipalidad de Pisco.

    Tenían una relación tóxica, de golpes y engaños. Durante meses vivió en medio de un amor enfermizo del cual dice que no podía escapar. Hasta que un día tuvieron una violenta discusión, y horas después ella lo buscó en su casa de Pisco. Ya por la tarde extrañamente apareció sin vida colgada de una correa, con múltiples moretones en el cuerpo.

    La fiscalía abrió investigación contra el entonces gerente de la municipalidad provincial de pisco, por el delito de feminicidio. Los amigos y familiares hicieron un plantón exigiendo justicia y que este caso se esclarezca.

    Tenía 38 años, natural de Chincha, era profesora de educación inicial. Vocación que desarrollaba con pasión y energía. Al parecer, Milagros tenía una vida plena, era madre de dos hijos, y estaba separada del padre de estos, pero decidió rehacer su vida, y se enamoró de Sandro Fernan Almeyda Lopez, de 40 años, abogado y gerente de la municipalidad provincial de Pisco. 

    Llevaba 3 años de relación, en todas las fotografías se les ve felices, en viajes y paseos. Milagros quería ser madre una vez más. Había empezado un tratamiento de fertilidad, dicen que quería tener un hijo con Sandro, a quien amaba locamente. Incluso había decidido renunciar al nido donde trabajaba para dedicarse a su familia, por ello le hicieron una despedida.

    En la fiesta de despedida llegó Milagros y Sandro, allí todos notaron que nada andaba bien, pues al parecer él le había apagado la luz y el brillo que resplandecían en ella, pues nadie sabía el calvario que vivía Milagros, en medio de una relación enfermiza. Esto comenzó el 22 de octubre cuando ella revisó el celular de su pareja.

    Según una constatación policial, estaban ambos en la casa de Sandro, ubicada en Chincha Alta. Aquí señala que ella descubrió que él le era infiel con una trabajadora de la municipalidad de Pisco. Ella presentaba lesiones en el pómulo izquierdo, según dijo Sandro, le había golpeado; a pesar de esto, ella se negó a denunciarlo.

    Ambos continuaron la relación, pero Milagros vivía atormentada. Han señalado que la otra mujer, con quien Sandro la engañaba, empezó a mandarle mensajes fulminantes. La hostigaba, la atormentaba, haciéndola vivir un calvario, dándole detalles íntimos de lo que hacía con este hombre.

    A pesar de esta situación, ese amor obsesivo la hizo continuar uno con él, pues dicen que Almeyda Lopez la buscaba y volvían. Al día siguiente, dicen que Milagros buscó a Sandro y ambos se pelearon nuevamente. Decepcionada del hombre que amaba, decidió publicar en el Facebook todo el engaño y los maltratos que vivió con él.  

    A las 3 y 10 de la tarde colocó este mensaje, que dice: "Deseo de todo corazón, que nunca conozcas a un narcisita, que te haga sentir, que te ama mientras te miente mirándote a los ojos, que te manipule y altere tu juicio, que te chantajee emocionalmente, que creas que un abuso sicológico es un acto de amor. Deseo que algún día tengas el valor de irte y no volver más".

    Minutos después puso otro mensaje donde escribe: "Sandro, maltratador, narcisista, mentiroso, jugaba con dos mujeres a la vez", colocando la fotografía de su rostro golpeado y el parte policial. Desilusionada, desesperada, difundió también los mensajes que le enviaba la mujer con quien le engañaba su pareja y otro donde señala que llevó 1 año de tratamiento de fertilidad para que él estuviera con otra mujer con dos pequeños hijos, este último mensaje fue a las 4 y 21 de la tarde.

    Milagros fue encontrada colgada en una puerta, su cuello estaba atado con dos correas, pero lo más extraño es que sus pies estaban en el piso, como si estuviese parada. Tenía múltiples moretones y golpes en los brazos y piernas, lo que hace suponer a los familiares y amigos que algo raro había pasado, pues la casa estaba totalmente desordenada, el televisor, el frigobar y el ventilador estaban en el suelo, su ropa y demás objetos tirados, además había vidrios rotos.

    Por ello, los familiares y amigos realizaron una marcha exigiendo justicia, pues para ellos esto no fue un suicidio sino un feminicidio. El mismo día que encontraron el cadáver, Sandro fue detenido, por ser principal sospechoso de la muerte de Milagros, pero al día siguiente fue liberado por falta de pruebas.

    Pero la fiscalía abrió una investigación preliminar por el delito de feminicidio contra Sandro Fernan Almeyda Lopez. Según el testimonio del sereno que acudió aquel día a la casa de Sandro, indica este lo llamó a las 5 y 5 de la tarde indicándole que se acerque a su oficina porque al parecer estaban violentando la puerta de su domicilio, al llegar la encontraron abierta y en el segundo piso, estaba Milagros sin vida, con varias lesiones en el cuerpo.

    Además, en este documento señala que la puerta no estaba forzada, en la casa se encontraron latas de cerveza, y cuando Sandro llegó, estaba en aparente estado de ebriedad con aliento alcohólico, señalando que desconocía los hechos, ya que estaba en una reunión en Chincha. 

    Pero lo extraño es que Sandro aquel día, por la mañana, le dijo a la hermana de Milagros que tenía que ir a una reunión en Pisco, y que incluso un patrullero de serenazgo lo recogió. En su manifestación, Sandro indica que el 17 de diciembre, a las 7 a.m., Milagros fue a buscarlo, estaba desesperada, a las 4 cuando se encontraba en su domicilio, recibió la llamada de la sobrina de la víctima, quien le dijo que milagros se dirigía a su estudio jurídico de Pisco con la finalidad de ingresar y llevarse sus pertenencias, por tal motivo decidió llamar a serenazgo.

    Sandro Almeyda acudió a una citación de la fiscalía, pero no quiso dar ninguna declaración. Lo llamamos por teléfono al número consignado en el expediente y estaba apagado. Lo buscamos en su vivienda de Chincha que consignó en el documento fiscal y su mamá señaló que estaba en Pisco. Luego fuimos a su casa de Pisco y tampoco lo encontramos.

    La Municipalidad de Pisco, por medio de un comunicado, señaló que separó a Sandro de sus funciones y a la mujer que llevaba una relación con él, a fin de facilitar el esclarecimiento de los hechos por parte de las autoridades.

    Finalmente, la justicia continúa con las investigaciones del caso para determinar qué sucedió realmente aquel 17 de diciembre, si Milagros acabó con su vida o si alguien lo hizo. Una extraña muerte que es materia de investigación.