COVID-19: La vacuna como odisea
En el interior del país el traslado de las dosis puede ser un vía crucis
Al interior del país trasladar las vacunas contra la COVID-19 y mantener la cadena de frío representa un reto para autoridades y personal de salud.
Algunos deben viajar por ocho horas o más por carreteras y trochas o en algunos casos a pie en zonas agrestes e inhóspitas.
Hay lugares que no tienen vías y no se puede llegar en carro, la única manera es a la muy antigua usanza inca: cuales chasquis caminando por distintas zonas.
Lo que piden los lugareños y el personal de salud es que se les pueda habilitar facilidades para que las vacunas lleguen a la población.
También solicitaron helicópteros para poder llegar rápidamente a las zonas más alejadas y contribuir con la salud de distintos pueblos lejanos del país.