Hoy:

    Alertan riesgos en embarcaciones informales usadas para paseos turísticos en el Callao

    Tras la reciente muerte del periodista Luis Miranda, otro navío terminó volcado en el mar y se tuvo que rescatar a más de 20 pasajeros que se embarcaron en un servicio irregular

    Foto y video: América Noticias

    Son momentos de angustia vividos en el mar del Callao. En menos de dos semanas el vuelco de dos embarcaciones ha enlutado a una familia y ha generado pavor entre los turistas que buscaban vivir un paseo inolvidable en islas chalacas.  

    Después de la tragedia que le arrancó la vida a nuestro colega, el periodista Luis Miranda, un nuevo suceso encendió las alertas en el mar de Grau y puso en riesgo la vida de otras 22 personas.

    Esta vez todos los tripulantes, la mayoría extranjeros, adultos y niños, fueron rescatados por la capitanía del puerto del Callao. La presencia del bote sobrecargado de pasajeros no paso desapercibo por el patrón de una embarcación formal que, al notar la presencia tomó una foto y dio parte a las autoridades.

    La muerte de Luis Miranda consterna y sorprende, pues él conocía bien la zona, fue su admiración por la reserva natural de lobos en el Callao lo que le llevó a mostrar su belleza en un reportaje de televisión.  

    En esas frías aguas del mar chalaco, cerca de la reserva natural que tanto admiró, El oso Miranda, partió de este mundo a la eternidad. Los rescatistas de la capitanía de puertos auxiliaron con vida a 19, de los 20 tripulantes del navío que, según la investigación, salió clandestinamente a navegar.

    El bote siniestrado habría partido del desembarcadero pesquero artesanal del callao, donde rechazaron nuestra presencia. Según el capitán de navío, Harry Chiarella, la lucha contra estas embarcaciones informales es constante, pero la gran extensión de nuestro litoral complica mantener un control las 24 horas.

    Solo tres dias después de la tragedia que acabó con la vida de nuestro colega, el vuelco de otra embarcación muy cerca de la isla Palomino, generó la atención de la prensa y las autoridades. Esta vez, las medidas de seguridad que la empresa tomó fueron determinantes para que todos los viajeros resultaran ilesos.

    Fue asi que emprendimos un breve recorrido por el mar chalaco. Por supuesto, en una embarcación formal, aunque la presencia de turistas era escasa.

    En nuestro recorrido pudimos notar de todo, embarcaciones formales cuyos pasajeros llevaban puestos sus chalecos salvavidas y pequeños botes a remo con grupos de turistas, algunos sin protección.

    Para la fiscal que investiga la muerte de Luis Miranda, se cometió una serie de imprudencias que generaron una tragedia que pudo evitarse. Cesar Adonis Caminiti Torres y Giancarlo Preciado Morales contaron que todo fue un lamentable accidente y que hicieron de todo para salvar al periodista.

    La justicia ha dictado prisión preventiva para el dueño de la embarcación y dos de sus trabajadores, quienes de ser hallados culpables podrían ir a la cárcel hasta por ocho años por el delito de homicidio culposo.

    Del otro lado, están los empresarios turísticos de la zona, que lejos de satanizar los paseos en bote en el Callao, sugieren elegir empresas formales, con seguro de accidentes y con permiso de zarpe.