SMP: Degüellan a madre y su hija dentro de su vivienda

Continúa la búsqueda del hombre que habría asesinado a su expareja y a su hija en san Martín de Porres. Según la familia, la mujer era golpeada constantemente por el sospechoso.  Dos muertes que han sumido a una familia en la más honda tristeza.

La tarde del último sábado, Saturnino Espinoza llegó hasta el departamento en el distrito donde vivía junto a su yerno, su hija y sus tres nietos. Nadie respondía a sus llamados, hasta que entró a su cuarto y encontró a su hija maría elena Espinoza Vílchez completamente ensangrentada.

Desesperado, busco a sus nietos en las otras habitaciones, pero lo que halló en una de ellas fue peor. Mía, su nieta de siete años también había sido asesinada. Todo frente a sus hermanos de solo tres años.

Para la policía y la familia de María hay un solo sospechoso de este doble asesinato. Su nombre es Anderson Carlos Portas Huamán y su historia con María se remonta a julio del 2021. Ambos vivían en su natal Cañete. Ella apenas se había separado del padre de sus tres hijos, al igual que él quien terminó su relación con la madre de sus dos hijos.

Pero la convivencia entre Anderson y María duró solo 6 meses. La familia de ella cuenta que el sujeto de 28 años la golpeaba constantemente. Esto preocupó a los seres queridos de María por lo que en abril de este año su padre se la llevó a San Martín de Porres, donde una semana después retomó la relación con el padre de sus hijos.

Sin embargo, al parecer esto no detuvo el hostigamiento de Anderson Portas. La joven madre denunció en reiteradas ocasiones a su expareja. En enero de este año declaró ante la policía que portas Huamán la agredió física y psicológicamente.

Dos meses después lo denunció por violación sexual por lo que un juzgado de Cañete dictó medidas de protección a favor de María. Anderson portas no podía acercarse a ella. Un equipo de América Noticias fue a buscarlo en la dirección que consigna en su Reniec, pero personas del lugar informaron que ya no vive ahí.

María y Mía ya descansan en paz en un cementerio de su natal Cañete. Mientras tanto, la policía continúa esperando que se emita una orden de captura contra el principal sospechoso de este doble feminicidio.