Sada Goray declaró a fiscalía que Darwin Espinoza recibió dinero para impulsar una ley a favor de empresarios pesqueros

La noche que la empresaria Sada Goray llegó al Perú, hace 11 días, una pregunta la puso en alerta. No quiso responder, y decidió terminar con la conversación. Y es que la respuesta que no llegó en ese momento esconde una historia desconocida hasta el día de hoy. Una historia que revela por primera vez cómo el poder de Sada Goray llegó, también, hasta el Congreso de la República.

Fue esa pregunta la que encendió las alarmas de la empresaria y cambió sus planes apenas había una vez más tocado suelo en su país. No fue a su cómoda casa de Surco y se quedó en el hotel del aeropuerto donde, finalmente, fue detenida.

Sada Goray evitó responder por una sencilla razón. Quería mantener en secreto lo que ella misma ha narrado ante la justicia. Las reuniones que tuvo con congresistas en su casa de Surco. Estos encuentros también son mencionados en la carpeta 266-2022 en la que la Fiscalía Suprema investiga a Pedro Castillo y a otros dos ministros de su Gobierno, por los delitos de lavado de activos y cohecho, es decir sobornos. Estos datos han sido reconfirmados por la Procuraduría de la Nación que también está informada del caso.

En la carpeta 266-2022 figura la declaración de un testigo protegido que ha contado con detalle una serie de reuniones secretas, entre Sada Goray y, por lo menos, dos congresistas de Acción Popular. Uno de ellos es el parlamentario Darwin Espinoza.

Darwin Espinoza está investigado por el caso del grupo de congresistas apodados “Los Niños". Un sobrenombre que, según la teoría Fiscal, el expresidente Pedro Castillo les puso a un grupo de parlamentarios de la bancada de Acción Popular que el mandatario logró captar para bloquear cualquier intento de vacancia. A cambio, “Los Niños” podían tener control sobre diferentes ministerios. 

En medio de estas pesquisas, es donde aparece la declaración del testigo protegido que narra las reuniones entre Sada Goray y dos congresistas de Acción Popular.

Según el testimonio, una primera reunión secreta se realizó a fines de septiembre del 2021 en una de las oficinas de este edificio en San Isidro. Hasta aquí llegó la empresaria Sada Goray junto a su amiga, y también investigada, Pilar Tijero prima del periodista Mauricio Fernandini. Las dos mujeres se encontraron aquí con los congresistas Darwin Espinoza y Enrique Alva. Alva es un viejo conocido de Sada Goray, pero la empresaria se veía por primera vez cara a cara con Darwin Espinoza.

El congresista Enrique Alva es trujillano como la empresaria. Aquí los vemos juntos en una foto del 2018. Es un evento del Colegio de Ingenieros de Trujillo que en ese momento era presidido por Luis Mesones Odar, el exesposo de Sada Goray y hoy prófugo de la Justicia. Enrique Alva y Luis Mesones son ingenieros y estudiaron juntos. Es, sin duda, un hombre de mucha confianza para Sada Goray.

Alva también es acusado de ser integrante de “Los Niños”, de hecho la policía allanó su casa hace un par de meses como parte de la investigación en su contra. Según el testimonio recogido por la investigación, fue el congresista Alva quien presentó a Darwin Espinoza con Sada Goray en la oficina de San Isidro. Sin embargo, Espinoza asegura que Alva nunca le ha hablado de su amiga empresaria.

Pero las indagaciones de la Fiscalía Suprema apuntan a lo contrario. La oficina en la que se reunieron pertenece a Ronny Andia, un empresario inmobiliario muy amigo de Sada Goray. Tan cercano que fue invitado a la fiesta que Goray hizo para los trabajadores de su empresa en el 2021. Aquí lo vemos con trago en mano mirando a su amiga bailar marinera con el periodista Mauricio Fernandini. Él no aceptó una entrevista formal pero nos informó que Sada Goray sí fue muchas veces a su oficina de San Isidro, pero que no tiene mapeado haberla prestado para una reunión en particular. Sin embargo, los testimonios en Fiscalía hablan de otros hechos que se condicen con la realidad.

Según lo narrado la intención de la reunión era ver qué proyectos podrían concretarse en el sector vivienda a favor de la empresaria Sada Goray y de su empresa Marka Group. Esa hipótesis fiscal cobra fuerza por el hecho que por entonces Darwin Espinoza era presidente de la Comisión de Vivienda del Congreso. Fue una primera reunión para conocerse, pero no fue la única.

La casa de Surco de la empresaria fue el escenario de una segunda reunión secreta. Asistieron las mismas personas: Sada Goray como anfitriona, su amiga Pilar Tijero y los congresistas de Acción Popular: Enrique Alva y Darwin Espinoza, quien se aferra a la negación.

Espinoza niega en todo momento cualquier relación con la empresaria, pero los detalles narrados una vez más se condicen con la realidad. En el testimonio que ha recogido la Fiscalía Suprema se cuenta que esa segunda reunión ocurrió en la quincena de octubre del 2021.

En la casa de Goray que hace pocos días fue allanada por la justicia, ante su círculo más íntimo, Darwin Espinoza aseguró que el grupo de congresistas llamado “Los Niños” habían pedido tomar el control del Ministerio de la Producción y que muy pronto podían colocar en puestos claves a los funcionarios que ellos quisieran.

En ese momento Sada Goray percibe una oportunidad y propone a su exesposo y hoy prófugo, Luis Mesones para ser viceministro de dicha cartera. Este hecho ha sido confirmado por otra declaración fiscal, la del aspirante a colaborador eficaz número nueve, declaración que está incluida en el pedido de prisión preventiva contra Goray.

Ahí se narra cómo, días después de la reunión con el congresista Darwin Espinoza, la empresaria le dice a su exesposo que será viceministro de Producción.

El testimonio cuenta que un sorprendido Mesones le dice a su exesposa que él no conocía nada del cargo. A lo que Goray le responde:

El testimonio narra que luego de esa conversación, Sada Goray coordinó directamente con Darwin Espinoza, con quien se comunicaba a través de un teléfono que la empresaria le entregó. Un celular que trajo de Estados Unidos activado con una línea de ese país.

Según la declaración del colaborador número nueve fue Sada Goray quien dio el primer paso para concretar una reunión entre el congresista Darwin Espinoza y su exesposo Luis Mesones.

Lo que es completamente comprobable es que el exesposo de Sada Goray, Luis Mesones, llegó a ser viceministro de Mype e Industria en la cartera de la Producción durante un año, desde diciembre del 2021 a diciembre del 2022.

En ese lapso se aprobó una ley que, según la tesis de los investigadores fiscales, sería la verdadera razón del interés de Sada Goray en el Ministerio de Producción.

El 26 de mayo del 2022 la bancada completa de Acción Popular presentó este proyecto de ley que, en la práctica, permite que el atún pescado por embarcaciones extranjeras en mar peruano y procesado en el país sea considerado como importación temporal y por lo tanto liberado del pago de impuestos. Así, dejarían de pagar el 30% de impuestos que la Superintendencia Nacional de Administración Tributaria (Sunat) venía reclamando desde el 2019.

La ley fue presentada y sustentada por la congresista Silvia Monteza, quien era presidenta de la Comisión de Economía. Ahora nos atiende con lentes oscuros por una reciente operación a los ojos.

Además de la reactivación económica, según los expertos, como el exministro de Pesquería Juan Rebaza, las grandes beneficiadas son las empresas procesadoras de atún que ahora tienen mayor ganancia al pagar menos impuestos. Pero, ¿cuál sería el interés de Sada Goray en este caso? Hasta donde se sabe no tiene empresas en el rubro pesquero. Pero uno de sus socios, sí.

Fernando Pazos Huayamares es un viejo conocido en el mundo de la pesca. Ha sido gerente y accionista de los grandes grupos económicos relacionados a la pesca.

Las investigaciones fiscales apuntan a este rubro porque Sada Goray ha declarado que fue testigo de una entrega millonaria de dinero al congresista Darwin Espinoza para impulsar la aprobación de la ley relacionada a la pesca en el Congreso.

El empresario Fernando Pazos no aceptó una entrevista formal, pero aseguró que no tienen ninguna relación con el tema y que nunca le ha pedido un favor a Sada Goray.

Hemos conversado con empresarios atuneros y los pescadores que participaron en las reuniones de trabajo donde se debatió sobre la ley. Todos aseguran que Darwin Espinoza nunca estuvo presente en las reuniones y que la ley era necesaria para impulsar la producción del sector pesquero.

Lo concreto es que en la Fiscalía de la Nación ya corre una investigación perfilada hacia la industria pesquera, basada en testimonios que son los primeros pasos de una relación insospechada hasta hoy: La corrupta empresaria Sada Goray con uno de los grupos políticos más cuestionados del Parlamento.