Puente Piedra: Extorsionador ataca pollería y mata a padre
Límber Cubas cenaba con su familia cuando fue alcanzado por las balas. El local era blanco de amenazas criminales.
Una noche familiar terminó en tragedia cuando dos delincuentes dispararon sin mediar palabra contra los comensales de una pollería en el distrito de Puente Piedra. Las balas cobraron la vida de Límber Cubas Pérez, un mecánico de 36 años, quien se encontraba en el lugar acompañado de su esposa, hijos y hermana.
El crimen ha dejado en evidencia un nuevo patrón en el accionar de bandas extorsivas que, al no recibir pagos, atentan directamente contra clientes inocentes.
El hecho ocurrió el pasado 6 de abril alrededor de las 9 de la noche. Según testigos, los atacantes llegaron en una motocicleta y uno de ellos abrió fuego desde la entrada del restaurante.
CLIENTE VÍCTIMA COLATERAL DE EXTORSIONES
Cinco disparos impactaron en distintas direcciones, dos de ellos alcanzaron a Límber Cubas, quien esperaba la cuenta mientras compartía una cena para conmemorar el aniversario del fallecimiento de su padre. Fue trasladado al hospital Lanfranco La Hoz, donde los médicos solo pudieron certificar su deceso.
La pollería donde ocurrió el ataque había sido víctima de amenazas a través de mensajes enviados por WhatsApp. Los criminales fingieron ser clientes, pero luego exigieron pagos bajo amenazas de muerte.
La negativa de los propietarios provocó represalias. Fotos y advertencias con contenido violento anunciaban lo que terminó sucediendo: un ataque contra los comensales.
Límber, natural de Jaén, Cajamarca, era el menor de trece hermanos. Llegó a Lima cuando tenía 16 años buscando mejores oportunidades. Fundó su taller de mecánica y formó una familia con Karen Valenzuela, su esposa, con quien tuvo dos hijos.
Era conocido por su dedicación al trabajo y por su carácter amable.
El crimen no solo ha devastado a su familia, sino que también ha generado indignación entre sus vecinos y amigos, quienes lo despidieron con honores en su taller y en la cancha de fútbol donde solía jugar cada semana.
Mientras tanto, su esposa y sus hijos enfrentan un duelo marcado por la injusticia y la impunidad.
Datos del INEI y la ONU revelan que el 27% de los limeños ha sido extorsionado al menos una vez en lo que va del año.
La historia de Límber Cubas es una más entre miles de víctimas colaterales de una violencia creciente que pone en peligro a cualquier ciudadano.