Pedro Castillo abandonó hospital II de Vitarte tras sufrir descompensación en penal

El ex presidente Pedro Castillo abandonó el hospital II de Vitarte luego de permanecer en su interior por cerca de ocho horas luego de haber sufrido una descompensación esta mañana cuando se encontraba conversando con su abogado al interior del penal Barbadillo en Ate.

En imágenes de Canal N, el ex mandatario salió del hospital bajo fuertes medidas de seguridad por una de las puertas del centro de salud, si bien las autoridades colocaron una mampara para que los simpatizantes no puedan verlo, logró ser reconocido por el movimiento policial.

Castillo fue conducido hacia la parte trasera del hospital donde abordó la misma ambulancia que lo condujo esta mañana, pese a que pudo vérselo de manera fugaz, se pudo reconocer al ex mandatario caminando junto a los agentes del INPE, cubierto al parecer, con una manta.

Si bien se desconoce a dónde se dirige debido a que no se hizo seguimiento al momento en que abandonó el hospital II de Vitarte, se prevé que haya vuelto al penal, lugar donde se encuentra recluido al ser acusado por el delito de rebelión por el golpe de estado fallido ocurrido en diciembre del 2022.

Pedían que Castillo vaya a otro centro de salud

Horas antes de su salida, simpatizante de Pedro Castillo exigieron a modo de protesta que sea derivado a un centro especializado, esto debido a que, según el abogado de Castillo, Wilfredo Robles Rivera, habría sufrido un pre infarto.

"Informó que hoy acudí a cárcel Barbadillo para entrevista con mi defendido el presidente Castillo Terrones a quien encontré con malestar y andar cansino, al preguntarle me refirió síntomas de Pre Infarto y que por ello exigía ser evacuado a nosocomio", escribió el abogado en su cuenta X (ex Twitter).

Ante esta situación, llegaron parlamentarios de izquierda hasta el hospital, entre ellos Pasión Dávila, Germán Tacuri y Kelly Portalatino, quien informó que, tras hablar con el médico tratante, que le darían el alta al ex mandatario.

Ella señaló no estar de acuerdo con esta decisión, por lo que solicitó que una junta médica evalúe el estado de salud del ex presidente, asimismo, indicó que, de tratarse de un mal cardiaco, el hospital II de Vitarte no sería la institución idónea para su atención sino que sea llevado al hospital Edgardo Rebagliati.