Alberto Fujimori y la operación Chavín de Huántar

Fue el 17 de diciembre de 1996 cuando un comando del MRTA (Movimiento Revolucionario Túpac Amaru), dirigido por Néstor Cerpa Cartolini, camarada Evaristo, tomó la residencia del embajador japonés Morihisa Aoki.

"Yo estaba en mi despacho viendo los asuntos pendientes del día y entra la llamada de súbito me dice 'señor presidente se trata de un asalto a la embajada japonesa'. Mi hermano estaba en la embajada, mi madre. Había arriba de quinientas personalidades que estos invitados para el onomástico del emperador. Había que mantener la calma", recordó el expresidente Alberto Fujimori.

Los 14 terroristas ingresaron por una casa vecina a la residencia. Habían utilizado una ambulancia para lograr su objetivo.

"Estábamos en el jardín bajo un toldo grande y, de pronto, una explosión muy fuerte. Entra en un grupo numeroso de personas diciendo que eran del MRTA", manifestó uno de los rehenes identificado como el padre Juan Julio Witch.

Conforme pasaban las horas, los terroristas empezaron a liberar rehenes.

"Mi madre ahí siendo liberada fue un gran alivio porque no sabía cómo reaccionaría el MRTA al estar frente a ella", rememoró Fujimori.

El MRTA se quedó con 72 rehenes, entre ellos, el expresidente Alejandro Toledo, el exministro de Relaciones Exteriores, Francisco Tudela, el entonces congresista Javier Diez Canseco y el vicepresidente de la república del segundo gobierno de Alan García, el almirante Luis Giampietri.

"La demanda no era que libera solamente algunos camaradas, quería que liberara a los 460 presos del MRTA. A la totalidad. Yo me puse de plano", indicó Alberto Fujimori.

Durante 126 días el gobierno de Fujimori se mostró abierto al diálogo. "Llamó a Montesinos y les explicó no una operación de tipo militar tradicional, sino utilizar estas técnicas de ingeniería y ahí colocar los explosivos y sorprender a los terroristas", agregó el expresidente.

Durante cuatro meses se planificó el rescate de los rehenes. Se entrenaron a 142 comandos en una réplica. Tras el fracaso de las negociaciones, 22 de abril de 1997, a las 3:23 de la tarde, el llamado comando Chavín de Huántar, con la orden de Fujimori, da inicio a la operación de rescate.

"Yo les digo 'comando tienen que acabar su operación con la explosión en la puerta principal en ocho segundos' y constató, efectivamente, que hay ocho segundos desde el momento que ingresa hasta que se produce esa explosión", recordó Alberto Fujimori años después.

Todos los terroristas fueron abatidos. El magistrado Carlos Giusti y los comandos Juan Valer Sandoval y Raúl Jiménez Chávez murieron durante la operación militar.

Fujimori, quien acompañó a los rescatados hasta el hospital militar, no pudo contener su emoción.

"Señores, en el Perú, no vamos a aceptar el terrorismo. En el Perú vamos a fundamentar los principios de la democracia. Y le hemos dado un ejemplo a la comunidad internacional que no se debe permitir el chantaje de los terroristas, que no se debe ceder".

Tras este hecho el exmandatario cobró notoriedad internacional en su lucha contra el terrorismo, aunque, fue criticado luego por mostrarse junto a los cadáveres de los emerretistas abatidos.