¿La vagina se agranda o se dilata por tener demasiadas relaciones?

Si alguna vez has escuchado que “la vagina se agranda o se abre mucho por tener demasiadas relaciones sexuales”, debes saber que lo cierto es que se trata de un mito; sin embargo, se relaciona con una gran característica de la zona íntima de la mujer.

¿La vagina “se abre mucho” si una mujer tiene demasiado sexo?

En una entrevista con ÚtileInteresante.pe, la Dra. Corina Hidalgo, ginecóloga, explica que el tamaño y la forma de la vagina no está relacionado directamente con la cantidad de sexo que una mujer tenga. 

“Lo que pasa durante el acto sexual es que la vagina se va a ensanchar porque recibe mayor irrigación, hay mayor vascularidad, hay un montón de líquido que empezamos a producir y da ese aspecto de que se va a ensanchar durante el mismo acto sexual”, señala la especialista.

Por su parte, Romina Castro, psicóloga y sexóloga, indica que la vagina es un conducto muscular, lo que la hace bastante elástica. Hay algunas que son más anchas, más angostas, más grandes y más profundas.

“Su tamaño no se ve afectado por la cantidad de penetraciones que tengas. La vagina cambia de tamaño para que entren y salgan cosas (penes, seres humanos, copas menstruales, tampax, etc.). Al ser elásticas, siempre vuelven a su forma original”, agrega Castro.

¿Qué pasa si tengo relaciones sexuales muy seguidas?

Por ejemplo, cuando una mujer mantiene una relación muy prolongada, es posible que se sienta un poco inflamada e hinchada la zona íntima, justamente por el tipo de fricción y el estímulo vascular que hubo. 

Sin embargo, la cantidad de parejas sexuales o el número de actividad sexual durante el día, no condiciona que tu vagina vaya a estar más amplia. La Dra. Corina precisa que la vagina tiene una capacidad de contracción para regresar a su estado cotidiano, producto de elastina, ácido hialurónico y una buena hidratación.

“El sexo en frecuencia para nada es malo, no te va a generar amplitud, te vas a sentir más húmeda efectivamente durante el acto sexual y, de repente, si empiezas a perder las contracciones, hay que valorar cuál es tu edad, si has subido de peso, cuáles son tus hábitos al orinar o defecar u otros hábitos del día a día”, agrega.

¿Qué pasa con la vagina durante el sexo?

Durante las relaciones sexuales, se liberan ciertas sustancias, ya sean hormonas o endorfinas, que van a estimular los genitales, tanto a la vagina como a la parte externa. Es decir, se llenan los vasos, hay un mayor riego sanguíneo. 

De esa manera, de acuerdo a la Dra. Corina, en medida que la mujer va llegando al orgasmo, se produce una hinchazón de manera fisiológica, donde la vagina si normalmente mide uno o dos centímetros, puede extenderse hasta cinco. Todo ello ocurre principalmente en el fondo, a diferencia de la parte de adelante de la vagina que es donde se siente el ajuste durante el sexo. 

“Si tú, durante el acto sexual, no tienes un buen ajuste adelante, de manera que el sexo penetrativo no te satisface, tenemos que buscar una solución. O sea, ahí tenemos un problema definitivamente”, afirma la ginecóloga Hidalgo.

Entre dichas situaciones se puede encontrar la incompatibilidad genital, ya que hay mujeres que tienen unas vaginas un poco más amplias y la pareja tiene un pene más pequeño o, por el contrario, hay mujeres que tienen una vagina más chica y la pareja tiene un pene grande. Ambos casos pueden incomodar las relaciones sexuales.

Otras situación está relacionada con problemas de laxitud. A raíz del paso de los años, algunas mujeres pueden perder la elasticidad natural de la vagina de manera natural porque son cambios fisiológicos normales.

Por otro lado, la sexóloga Castro indica que una de las características de la vagina es que cambia dependiendo de la respuesta sexual. Por ejemplo, durante la excitación, esta zona aumenta la lubricación y el útero se eleva, por lo que permite una mayor expansión.

Incluso, cuando una mujer se encuentra en plena actividad sexual, masturbación, etc., el extremo superior de la zona de la vagina se puede abrir o inflar como una especie de globo, que aumenta más de tamaño durante el llamado orgasmo.

Beneficios de las relaciones sexuales para las mujeres

Menor malestar en la zona íntima a futuro: “Estas pacientes tienen menos malestar en la zona genital que las mujeres que dejan tempranamente la actividad sexual. Las personas que llegan a su vida sexual activa a los 60 o 70 años tienen menos molestias, incluso en sequedad”, asegura la Dra. Corina.

La especialista explica que el sexo mejora la hidratación y la producción de ácido hialurónico, debido a la vascularidad se produce en dicha esa zona. Se genera un estímulo para que se vuelva a producir un nuevo colágeno. 

Esto no significa que no vaya haber nunca incomodidad o atrofia en un futuro, ya que los estrógenos se pierden con el pasar de los años y a medida que se presenta la menopausia.

Fortalecimiento del suelo pélvico: Al aumentar la vascularidad, generar nuevos vasos, se produce nuevo colágeno y eso mejora la elasticidad de la vagina.

Mantiene la hidratación: Se necesita una adecuada lubricación para evitar infecciones, molestias por la sequedad o hacer un síndrome genitourinario por atrofia más adelante en la menopausia. La actividad brinda esa hidratación adecuada.

Liberación de hormonas beneficiosas: “A nivel hormonal regula la presión, mejora los niveles de ansiedad y estrés, porque llegar al orgasmo o el mismo sexo como tal, independientemente del orgasmo o no, también genera liberación de hormonas que son para nuestro beneficio”, precisa la especialista.

Entre otros beneficios de tener actividad sexual, está el envejecimiento lento de los genitales, que se traduce a reducir la posibilidad de tener atrofias tan marcadas porque la vulva también envejece. 

Asimismo, se observa una menor producción de desgarros vaginales en pacientes que empiezan a tener relaciones sexuales con más frecuencia. 

Higiene de la vagina después de tener relaciones sexuales

La Dra. Corina brinda las siguientes recomendaciones a tomar en cuenta post relaciones sexuales.

Tomar un baño: Este tiene que darse antes y después del acto sexual de preferencia y en ambas parejas. Al inicio, sobre todo en el caso del varón, si no tiene la circuncisión, la doctora asegura que es importante que se remangue el prepucio y se lave muy bien el pene, ya que esta es la zona donde se guardan bastantes secreciones y ello puede generar cambios en el pH vaginal, lo que puede desencadenar una infección. 

Orinar después del acto sexual: Especialmente si tienes ganas de miccionar. Sin embargo, no es necesario aguantar la orina, ya que puede generar problemas a nivel de vejiga. 

Limpieza de zona íntima femenina: La Dra. Corina sugiere los baños completos, más allá de los simples baños de asientos. Si no existe tiempo para ello, lo adecuado es limpiarse con papel la zona y luego darse una ducha, sobre todo en aquellas pacientes que son sensibles.

Usar preservativo si quieres tener sexo anal: “Si tú practicas sexo anal, tienes que ir de la vagina al ano y terminar ahí, nunca pasar de atrás hacia adelante porque vas a arrastrar germenes. Usar un condón a base de látex y con lubricante a base de agua porque el ano no lubrica”, afirma la especialista.

Asimismo, en torno a otras recomendaciones generales, la Dra. Corina también aconseja el recorte de bellos, ni muy largos ni ausentes, ya que funcionará como una capa protectora y ayuda a mantener una adecuada humedad.

“Si los tenemos muy largos, generamos mucha humedad, más la fricción y el calor, de repente generamos una infección vaginal. Si los tienes ausentes, al momento de depilarte tienes que echar tu hidratante vulvar para evitar que salgan todas esas células o bacterias que pueden generar alguna infección o una irritación”, añade.

Finalmente, la ginecóloga Hidalgo recomienda los lubricantes a base de agua para aquellas mujeres que sufren de desgarros e irritación con el ingreso de pene o juguete sexual, y después de las relaciones sexuales. Evitar aceites o lubricantes de silicona que puedan generar cambios a nivel del pH vaginal.

Así que ten en cuenta esta información para derribar todos aquellos mitos de que una mujer "queda muy abierta” por tener sexo. No obstante, no olvides que si notas algo extraño en el aspecto de tu zona íntima o incluso dolor durante las relaciones sexuales, lo mejor será visitar a un especialista.