¿Por qué no deberías obligar a tus niños a dar besos y abrazos?
Hay muchos peligros detrás de obligar a los niños a saludar de manera muy afectuosa a los adultos
Seguro te pasó que, cuando eras niño o niña, tus papás te regañaban si no saludabas con beso y abrazo a un primo, tío u otra persona adulta. Según algunos especialistas, obligar a tus hijos a hacer esto puede ser peligroso.
Se dice que el problema con la insistencia en abrazos y besos es que se convierte en una instrucción-regaño. Con esto, estás insinuando que habrá una consecuencia negativa o castigo si no cumplen.
Así que cuando les exiges "dar un abrazo y un beso", estás imponiendo algo y tus hijos lo tomarán como "no me importa si te sientes cómodo o no, tienes que mostrar afecto".
¿Por qué obligar a un niño a dar besos u abrazos a un adulto puede ser peligroso?
Cuando un niño se siente obligado a mostrar afecto, recibe el mensaje de que no tiene control de su propio cuerpo. Y ese es un mensaje peligroso pues piensan que, si no cumplen con dar afecto a un adulto, tú lo vas a regañar y esto aumenta las probabilidades de ser abusados sexualmente, informa en un artículo el portal Nueva Mujer.
En otras palabras, si un desconocido, con malas intenciones, le pide que a tu hijo que lo haga, estará "programado" a cumplir. Sin embargo, si le has enseñado a que puede decir que no si no se siente cómodo, es más probable que pueda alejarse si alguien le pide ese acercamiento físico.
Por su parte, la psicoterapeuta clínica Kristell Pacheco, señala la importancia de respetar el espacio personal de los más pequeños y permitirles decidir cuándo y cómo interactuar físicamente con los demás.
"Presionar a dar abrazos, besos u otras muestras de afecto, envía el mensaje equivocado de que el niño no tiene control sobre su propio cuerpo y bienestar. Esto puede socavar su confianza y
hacerlos más vulnerables a desarrollar una falta de autonomía en el futuro", acotó la especialista.
Alerta ante el abuso sexual
De otro lado, podrías estar ignorando importantes señales que tu hijo trata de decirte. Un niño que no quiere abrazar a un adulto podría significar que algo más está sucediendo. Alguien cercano al niño podría haberlo herido intencional o accidentalmente. Cuando rechaza un abrazo, ya sea de un adulto o de varios, pregúntale por qué no quiere hacerlo. Podría ser nada, pero es mejor averiguar cualquier posible caso de abuso.
Razones para no obligar a los bebés a dar besos
Es importante que los padres mantengan una charla abierta con sus pequeños sobre el cariño y la educación. Pacheco diferencia que las expresiones de cariño deben ser entendidas como una forma natural y autónoma de expresión, mientras que los buenos modales demuestran respeto a otras personas.
En esta línea, te compartimos las siguientes cinco razones por las que no se debe obligar a los pequeños al afecto forzado:
1.- Respeto a su voluntad: Obligar a un niño a dar besos va en contra de su voluntad y autonomía, lo que puede generar confusión sobre sus límites personales y su capacidad para tomar decisiones sobre su propio cuerpo.
2.- Significado de los besos: Para los pequeños, los besos son una expresión de cariño y amor, y no deben ser vistos como una norma social o una muestra de buenos modales. Forzarlos puede distorsionar el significado genuino de esta muestra de afecto.
3.- Educación sobre el consentimiento: Obligar a los niños a dar besos contradice la educación sobre el consentimiento y el respeto a los límites personales. Es importante que los niños aprendan a expresar y respetar su consentimiento frente a las muestras de afecto físico.
4.- Desarrollo de la autoestima: Forzar a un niño a dar besos puede afectar su autoestima y generar sentimientos de incomodidad. Respetar su decisión contribuye a fortalecer su confianza en sí mismo y en la expresión auténtica de sus emociones.
5.- Límites y educación social: Permitir que los niños elijan cuándo y a quién quieren dar muestras de afecto físico les ayuda a comprender la importancia de establecer límites y a desarrollar una comprensión saludable de las interacciones sociales.
Recomendaciones
- Permite que tu hijo tenga sus formas de demostrar cariño o agradecer; por ejemplo: hacer un dibujo, compartir un pedazo de su comida favorita o leerle un libro son una buena idea. Estos gestos cuentan tanto como un abrazo y tu hijo necesita estar de acuerdo con esto.
- Enséñale que tiene derecho a elegir si quiere que alguien le haga cosquillas o si quiere sentarse en el regazo de alguien, eso le demuestra que puede tomar esas decisiones basándose en su nivel de comodidad.
- Si un pariente le pide un abrazo a tu hijo, pregúntale si le gustaría hacerlo y no lo regañes si se niega.
- Y lo más importante, implementa la regla de que nadie tiene que tener contacto físico con él si no lo desea, esto incluye familiares y amigos cercanos.
- Finalmente, recuerda que los niños no están obligados a agradecer el regalo de la abuela con un beso o un abrazo, un “gracias” y una sonrisa son suficientes.
Con información de Nueva Mujer/BBMundo