Incendios forestales: ¿La "siembra de nubes" es una solución?

Los incendios forestales en 22 regiones del Perú se han convertido en una emergencia ambiental crítica que ha arrasado con más de tres mil hectáreas de bosques naturales y ha provocado la pérdida de fauna silvestre y de 16 vidas humanas hasta el momento. 

Antes estos acontecimientos, se ha declarado estado de emergencia en las regiones de Amazonas, San Martín y Ucayali, debido a la propagación rápida de estos incendios.

Si bien la actividad humana es una de las causantes directas de estos siniestros, también lo es la crisis climática que se asevera año tras año y que principalmente promueve la escasez de lluvias y las sequías extremas. 

Por ello, una respuesta contra estos incendios forestales es la generación artificial de lluvias o “siembra de nubes”, una técnica para inducir la ocurrencia de precipitaciones. Pero, ¿se podría aplicar en nuestro país?

¿En qué consiste la siembra de nubes?

La siembra de nubes consiste básicamente en aumentar exponencialmente la caída de lluvia en zonas donde son escasas o es una temporada muy seca, a través de la liberación de yoduro de plata en las nubes.

En entrevista con Agencia Andina, Diego Rodríguez, especialista en meteorología del Senamhi, explica que el yoduro de plata es un compuesto químico que tiene una estructura cristalina y al tener contacto con las nubes, hace posible la condensación del vapor de agua, lo que finalmente provoca la lluvia de forma artificial. 

“En el proceso se rocían partículas finas en forma de aerosol o polvo (del yoduro de plata), en la nubes ubicadas entre los dos mil y cuatro mil metros de altura. Existen dos técnicas de siembra de nubes. Un avión dispara bengalas o desde el suelo se lanzan pequeños cohetes que contienen las partículas”, se explica en este video. 

¿Es posible aplicar la siembra de nubes en Perú?

Este procedimiento experimental se originó en 1946 en Estados Unidos y se aplica en diversos países desarrollados, lo que ha sido motivación para que el Gobierno Regional de Arequipa empiece a elaborar un proyecto de siembra de nubes que sea financiado por empresas privadas. 

Se estima que esta propuesta tiene un costo de 500 mil dólares y busca ser una estrategia exitosa que pueda abastecer lluvia generada de forma artificial las represas regionales ante la temporada de sequías. 

Sin embargo, para Rodríguez, en la experiencia internacional la siembra de nubes es una práctica que presenta limitaciones, no es posible controlarlo del todo y los resultados no son lo suficientemente efectivos.

“Solo en algunos puntos se logra que llueva y en otros no (...) Uno puede bombardear una zona muy grande y puede afectar a zonas no bombardeadas porque las nubes se desplazan y con ello ocasionar, posiblemente, efectos adversos”, asegura. 

Asimismo, el especialista del Senamhi señala que se requieren ciertos tipos de nubes, como cúmulos nimbos, aptas para aplicar esta técnica y capaces de generar lluvias.

Ello sin contar que la siembra de nubes necesita una aplicación continúa y sus resultados no son inmediatos, lo que se traduce también en un alto costo, desde la adquisición del yoduro de sodio en grandes cantidades hasta recursos técnicos y especialistas. 

Rodríguez indica que esta tecnología aún es experimental y sus resultados aún no son seguros ni controlables en el Perú, que tiene una realidad ecosistémica distinta a otros países donde pueda haber funcionado generar lluvia artificial.