¿Cómo saber si tengo problemas en los pulmones por COVID-19?
¿Te punza la espalda o aún tienes dificultad para respirar? Estas son las pruebas para identificar qué tan sanos están los pulmones, sobre todo en una persona que superó la COVID-19
Tras superar una infección por coronavirus, se debe prestar mucha atención a las secuelas. Los dolores crónicos de espalda, baja saturación o una tos persistente pueden ser signos de que existen problemas en los pulmones.
Por ello, es recomendable que los pacientes que superan el COVID-19 evalúen el nivel de compromiso pulmonar, ya sean supervivientes de casos críticos, tras padecer una neumonía leve o con síntomas menores, en donde también existe inflamación pulmonar.
¿Qué pruebas existen para conocer si los pulmones están sanos?
En una entrevista para Útil e Interesante, el Dr. Juan Francisco González, médico neumólogo de EsSalud, menciona que existen dos tipos de evaluación a los pulmones en personas post COVID-19: los exámenes funcionales-respiratorios y los exámenes de imágenes:
Exámenes para conocer el estado de los pulmones
- Espirometría: Es un estudio rápido de consultorio. Se utiliza para diagnosticar complicaciones respiratorias como el asma o la enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC). Con el espirómetro se evalúa cuánto aire pueden retener los pulmones y con qué rapidez uno inhala y exhala.
- Radiografía de tórax: Permite obtener imágenes de tejidos, órganos y huesos del organismo, con el fin de realizar un diagnóstico más prudente.
- Tomografía pulmonar: Demora más tiempo que la radiografía (entre unos 10 a 30 minutos) y se realiza en un hospital o centro especializado. Permiten detectar señales de inflamación, infección, lesiones o enfermedades pulmonares de forma más rápida y detallada.
¿Cuándo se pueden realizar estas pruebas para conocer el estado de los pulmones?
El Dr. Luis Pacora del portal “Hablando de Salud” menciona que el tiempo ideal para que uno se realice evaluaciones pulmonares es a partir de un mes después de superar la infección por coronavirus.
Por ejemplo, si un 14 de enero perdió el olfato (día 1 del cuadro clínico), debe retroceder alrededor de una semana para identificar el contagio (7 de enero). El virus permanecerá aproximadamente un mes y desde la primera semana de marzo, se podrán realizar las pruebas.
Recuerda que cada paciente desarrolla un grado de infección distinto, así que trata de buscar una evaluación profesional detallada para obtener un tratamiento personalizado.