Hoy:

    Profesor universitario reprobó a mitad de su clase por culpa de la Inteligencia Artificial

    El docente generó controversia después de confiar en ChatGPT para detectar trabajos escritos por software. Sin embargo, el docente no consideró que el chatbot no puede identificar textos preexistentes

    Foto: Pexels
    Foto: Pexels

    Un caso que ha dado la vuelta al mundo se originó en la Universidad de Texas A&M, donde el profesor Jared Mumm, especializado en ciencias agrícolas y recursos naturales, decidió utilizar ChatGPT de OpenAI para evaluar si los alumnos habían utilizado el programa para redactar sus tareas de ensayo. Envió las últimas tres asignaciones de todos los estudiantes a la plataforma y si ChatGPT reclamaba la autoría del contenido en ambas ocasiones, se les asignaba una calificación de 0.

    Sin embargo, el error cometido por el profesor radicó en no considerar que el chatbot no es capaz de detectar textos previamente redactados. Esta falta de precisión llevó a que más de la mitad de los estudiantes fueran reprobados y, como consecuencia, la universidad suspendió sus diplomas oficiales, incluso para aquellos que ya se habían graduado.

    Este caso ha generado un debate sobre la confiabilidad de la inteligencia artificial en la evaluación académica y la necesidad de que los profesores comprendan plenamente las capacidades y limitaciones de estas herramientas. Asimismo, se ha destacado la importancia de un enfoque equilibrado en la detección de plagio y la utilización de tecnología, evitando consecuencias injustas para los estudiantes.

    A medida que la educación se adapta a las nuevas tecnologías, es fundamental que tanto profesores como instituciones establezcan políticas y procedimientos claros para el uso de la inteligencia artificial en la evaluación académica, garantizando una evaluación justa y precisa que no perjudique a los estudiantes que hayan realizado su trabajo de manera ética y honesta.