Hoy:

    Francia semiparalizada por las huelgas contra la reforma laboral

    La policía francesa se empleó gases lacrimógenos contra encapuchados durante una gran manifestación de protesta 

    Video: AFP

    Las huelgas en Francia contra un proyecto de reforma laboral del gobierno socialista se extendieron el jueves a las centrales nucleares, provocando perturbaciones en el aprovisionamiento de gasolina, y enfrentamientos de jóvenes con la policía.

    En la octava jornada de movilizaciones, la policía francesa se empleó gases lacrimógenos contra encapuchados durante una gran manifestación de protesta contra la reforma laboral en París, después de que algunos asistentes empezaran a romper vitrinas y dañaran vehículos a su paso.

    [LEE: Mujer francesa se suicida en directo en aplicación Periscope]

    Una persona resultó seriamente herida, según la prefectura de policía. Fueron detenidas 32 personas en París, 62 en toda Francia.

    Activistas sindicales bloquearon varios puentes mientras que conductores de trenes y controladores aéreos cesaron en gran parte su actividad.

    Según las autoridades, la movilización llevó a las calles a 153.000 personas en todo el país, mientras que los sindicatos aseguraron que habían contado hasta 300.000 participantes.

    [LEE: Francia: trabajador demandó a su exjefe por trabajo tortuoso y pide compensación]

     

    La situación parecía más calmada el viernes y a primera hora de la tarde el Secretariado de Transportes informó a la AFP de que todos los depósitos petroleros del país habían sido desbloqueados a excepción de uno que seguía en huelga.

    Pese a ello, la perspectiva de la penuria parece instalarse en los ánimos, como ilustraba la reventa de gasolina a alto precio en internet y la explosión desde el martes de la búsqueda "cómo hacer trasvase depósito" en el motor de búsqueda Google.

    El viernes, el responsable de la patronal, Pierre Gattaz, denunció "métodos propios de delincuentes", tachó de "irresponsables" a los detractores de la ley y llamó a "resistir al chantaje" de los sindicatos contestatarios.

    [LEE: Francia: condenan a ocho años de cárcel al "dentista del horror"]

    Lanzada hace apenas tres meses, la movilización social se endureció la semana pasada con el bloqueo de puertos, refinerías y depósitos de carburante.

    Aunque las protestas en la calle no ha llegado a explotar, quienes se oponen del proyecto, y la CGT en particular, juegan a fondo la carta de la acción directa en sectores económicos clave donde este sindicato está fuertemente implantado, y llaman a la "generalización" de las huelgas.