Argentina: Javier Milei se reunió con opositor Edmundo González
El opositor venezolano, Edmundo González Urrutia, se reunió con el presidente argentino Javier Milei en la Casa Rosada en el marco de su gira por Latinoamérica. Una gran multitud se congregó para apoyar al dirigente quien también confirmó su visita a Estados Unidos
El presidente argentino Javier Milei le dio un cálido recibimiento al opositor venezolano Edmundo González Urrutia, quien llegó a la Casa Rosada como parte de un gira que realizará por varios países de Latinoamérica.
“Estamos haciendo lo que la causa y la libertad requiere, ni más ni menos. Gracias por venir y estar en nuestra casa”, indicó el mandatario argentino.
Luego de una reunión privada Milei y el dirigente venezolano de 75 años saludaron desde el balcón de la sede de gobierno a los manifestantes que se congregaron en la céntrica Plaza de Mayo.
Eran cientos de venezolanos los que se congregaron para apoyar al diplomático que se encuentra exiliado en Madrid y que asegura tomará posesión como presidente de Venezuela el 10 de enero en lugar de Maduro.
En declaraciones a la prensa, Edmundo González, dijo que se siente emocionalmente más cerca de cumplir el mandato que le dieron los venezolanos sin revelar nuevamente cómo lo hará.
“No voy a revelar más de lo que ya he dicho. Mi intención es ir a Venezuela simplemente a tomar posesión del mandato que me dieron los venezolanos”, señaló el opositor venezolano.
También indicó que tiene previsto un encuentro con el presidente estadounidense Joe Biden en Estados Unidos, a donde viajará en las próximas horas.
En tanto la lideresa opositora de Venezuela, María Corina Machado, agradeció al presidente argentino por recibir y apoyar a González Urrutia. A través de las redes pidió a los venezolanos que acompañen al dirigente opositor.
La visita de González a Argentina se da en medio de un recrudecimiento de la tensión entre Caracas y Buenos Aires debido a la detención de un gendarme argentino en Venezuela.
Pero la relación entre Milei y Maduro ya era complicada, con numerosos intercambios de insultos, pero se terminó de romper cuando Argentina no reconoció el resultado electoral que le dió el triunfo al líder chavista.