Hoy:

    El testimonio del empresario que fue secuestrado 4 días

    En exclusiva para Domingo Al Día, el testimonio del empresario que fue secuestrado 4 días y por el que exigían el pago de 100 mil soles para liberarlo

    Foto y video: América Noticias

    Hace una semana un prestamista fue secuestrado en Independencia. Los criminales pedían 100 mil soles por su liberación, pero tras 4 días de cautiverio fue liberado. En exclusiva, la víctima dio su desgarrador testimonio para Domingo Al Día, y cuenta todos los detalles de este terrible encierro.

    16 de agosto, 7 y 19 de la noche, una cámara de seguridad registra a este hombre que camina rumbo a su casa en independencia. Lleva una polera blanca con gris, pero observé a este sujeto que se acerca a él. De inmediato aparece su cómplice; los dos lo amenazan y se lo llevan.

    Los criminales habían acondicionado un ambiente para mantener a la víctima en cautiverio. En las imágenes se ve cómo ingresan a la casa; allí se observa al prestamista, lleva un morral rojo, y va totalmente asustado; al lado la venezolana Wilianyelis Daniela Mendoza Alvarez de 19 años, quien había alquilado la habitación; detrás va su cómplice, quien sería Hector Rodríguez Perdomo de 19 años, alias "Muelas", que en todo momento habla por teléfono, empuja a la víctima; son las 8 y 50 de la noche. En el tercer piso la mujer sonriente sube primero, luego el empresario, quien finalmente es encerrado en el cuarto.

    Así empieza la tortura, el terrible calvario de este hombre de 38 años. "Me sacaron del pasador las zapatillas, me empezaron a amarrar las manos y los pies y de allí me pidieron el número de mi mamá para que pidan recompensa porque supuestamente eran de la banda de los pulpos", contó en exclusiva.

    "Me tuvieron amarrado, echado en el suelo, con un colchón en el suelo". Contra la pared, como para no ver […] En el cuarto ¿cuántas personas había? Desde el primer día estaban los dos del principio y la chica […] ¿En algún momento Ud. pudo dormir? No pude dormir con todo esto que está pasando. Me puse a orar, orar, orar", relató.

    Sus ojos se llenan de terror y miedo al recordar cada pasaje de estas terribles escenas que marcaron su vida… Al ser torturado día tras día… Las marcas en sus muñecas develan la crueldad con que fue atado para inmovilizarlo; con las manos hinchadas, se aferró a las oraciones, pidiendo solo a Dios por su vida.

    Los secuestradores se comunicaron con la familia y solicitaron 100 mil soles por la liberación de la víctima; allí empezaron los mensajes amenazantes. Desesperados, los padres, tíos y hermanos del agraviado intentaron juntar el dinero; depositaron solo 16 900 soles, pero estos criminales amenazaron con matarlo.

    Incluso le hicieron grabar un video, como prueba de vida; para él fue un calvario tener a sus atacantes al frente, apuntándolo con un arma de fuego.

    "Si no lo decía me golpeaban con la cacha de la pistola así de costado, por atrás, por eso con miedo tenía que hacerlo sí o sí […]". ¿Pensó en algún momento que podía morir? Si. ¿Por tanto golpe que me metían con las pistolas lo amenazaban? Si, me amenazaban de muerte, una pistola me pusieron una pistola habla, habla vas a hablar así - traumático? Traumado hasta ahora no lo puedo superar", recordó.

    El hombre de 38 años vivió todo un calvario durante 4 días y 96 horas de torturas en el interior de esta vivienda de la urbanización San José de El Agustino, donde estuvo atado de manos, amordazado en el tercer piso de esta casa, sin que nadie sospechase nada.

    Nadie sabía que allí adentro había una persona secuestrada, sin poder gritar ni pedir ayuda; sumido en el silencio y el miedo a merced de unos despiadados sujetos. Fueron 4 días que parecían eternos, donde este señor vivió amenazado, en medio de armas, drogas y condiciones infrahumanas.

    "El jefe decía que me den de comer y ellos mayormente fumaban marihuana y droga y yo olía, olía, olía, desde el día que me capturaron hasta la salida […]" Me habrán dado dos veces sólo comida, no tenía hambre también, o sea de los 4 días solo le dieron de comer dos veces o un día […] Cuando a veces pedía agua no me daban. Cuando quería miccionar me daban una botella. Echado en la cama, tenía que ver la forma de miccionar, ¿con la mano amarrada? Sí, con la mano amarrada", contó el hombre.

    La víctima estuvo custodiada por diferentes personas que hacían relevos día a día; esta vez era el turno de Héctor que ingresó con Daniela del brazo. Simulaban ser pareja como se observa en este video.

    Con los vouchers de pago que se hacían a los secuestradores, se identificó a miembros de esta banda criminal. Las cuentas estaban a nombre de Dayana Carolina Chacón Sánchez y Cesar Augusto Arias Romero, ambos de nacionalidad venezolana.

    El sábado 17 de agosto retiraron un adelanto del pago. Se ve a Carolina con una caja de reparto en la espalda llegando a este agente del distrito de Los Olivos. Saca el dinero y este sujeto de casco la acompaña; se trata del venezolano Simón Alberto Torrealba Suarez de 24 años, a quien le entrega los billetes.

    Ambos eran los encargados de retirar el dinero. La división de secuestros y extorsiones de la dirigencia, por acciones de inteligencia, ya les seguía los pasos, y lograron capturarlos.

    Información que llegó a oídos de sus cómplices, que intentaron llevarse a la víctima hacia otro lugar de cautiverio, pero al poner resistencia, lo abandonaron en esta habitación. Aquí se ve como Simón sale corriendo del lugar; a los minutos escapa el empresario totalmente aturdido.

    La policía lo había encontrado; al fin la víctima pudo ver la luz de esperanza, respirar libertad y abrazar a su familia. La Policía logró capturar a 7 ciudadanos venezolanos, integrantes de la banda Los Secos de Huandoy. En el cuarto se encontró la polera gris y el polo rojo de la víctima.

    Todos ellos cuentan con antecedentes por tenencia ilegal de armas de fuego, receptación, resistencia a la autoridad, tenencia ilegal de armas de fuego, robo agravado y estafa. Dayana Carolina tiene denuncias por delitos informáticos en Madre de Dios, el 7 de mayo y el 25 de mayo en Trujillo. Wilianyelis Daniela Mendoza Álvarez está inubicable, tanto como Cesar Augusto Arias Romero.

    La policía no descarta que esta banda criminal esté vinculada también a la extorsión y otros secuestros. Tembloroso y asustado, este hombre espera algún día superar el trauma que ha marcado su vida y ha mancillado su alma, al sentir que su existencia estaba en manos de unos feroces criminales, quienes podían acabar con él en cuestión de segundos.