Hoy:

    Morocoha: la mudanza de todo un pueblo condenado a la explotación minera

    Un sector de pobladores se resiste al cambio y asegura que luchará "hasta el final".

    Junín .

    Morococha está a punto de desaparecer del mapa de Junín, pues durante el gobierno del ex presidente Alan García, la empresa minera Chinalco recibió la concesión para operar en sus tierras durante 36 años, tiempo en el cual podrá extraer de un cerro 1 millón de toneladas de concentrado de cobre y 4 millones de onzas de plata anualmente.


     


    Para esto, la empresa privada tuvo que construir otro pueblo llamado Carhuacoto e invertir 50 millones de dólares en infraestructura. El nuevo lugar cuenta con 1050 casas modernas y 25 edificios públicos, sin embargo un sector de la población se opone al cambio y exige empleo para sus generaciones además de una indemnización por daños emocionales y económicos producidos por el cambio.


     


    Cuando se informó acerca del cambio, se abrió el diálogo entre la empresa y las organizaciones civiles, pero se advirtió que no todas participaron pues no estaban reconocidas por las mesas de lucha contra la pobreza.


     


    Los pobladores opositores al cambio exigen que Chinalco firme un convenio marco para el desarrollo sostenible, elaborado junto al alcalde del poblado, el cual sostiene que la empresa otorgue trabajo al 60% de la población, realice un pago de 300 millones de dólares de indemnización y los haga ser dueños de acciones de la empresa por otros 10 millones.


     


    Cabe resaltar que Morococha está inmersa en la pobreza. Las viviendas están a punto de colapsar y no existe la tranquilidad de tomar agua limpia. El proyecto, considerado una de las inversiones más importantes para el país, dejará ganancias por 7 mil 600 millones de dólares por impuestos a la renta, 3 mil 800 millones por canon minero y 760 millones por regalías.