Extorsionadores obligan a empresaria de Gamarra a cerrar tiendas

Una empresaria del emporio comercial de Gamarra, en La Victoria, tomó la drástica decisión de cerrar sus dos tiendas luego de recibir amenazas de muerte por parte de extorsionadores. Los delincuentes no solo le exigieron el pago de un cupo de mil soles, sino que también enviaron mensajes intimidantes con imágenes de armas, fotografías personales y datos sensibles de su familia.

Cierra sus tiendas en Gamarra por extorsión

“He recibido amenazas fuertes contra mi persona, contra mi familia, contra mi negocio que está cerca a Gamarra”, declaró la víctima, visiblemente afectada. Los extorsionadores incluso adjuntaron su árbol genealógico completo, con nombres, rostros y parentescos de sus seres queridos, como una forma de presionarla.

La empresaria aseguró que los criminales le escribieron que, si no se contactaba con ellos, atentarían no solo contra su vida, sino también contra sus trabajadores. Ante este escenario, y por miedo a represalias, optó por cerrar sus locales ubicados en el jirón Parinacochas, zona comercial del emporio.

Según su testimonio, la situación que atraviesa no es aislada. Indicó que muchos empresarios, tanto grandes como pequeños, están siendo víctimas de extorsión. Algunos pagan por temor, otros cierran, y muy pocos se atreven a denunciar debido a la desconfianza en las autoridades. “Esto asusta. Ya no puedo trabajar. Hay personas que viven de mi trabajo, que reciben un sueldo, y ahora están afectados”, lamentó.

Dueña de tiendas en Gamarra teme por su vida y la de sus empleados

La comerciante acudió a la División de Investigación de Secuestros y Extorsiones de la Dirincri para denunciar el caso. Según informó, los agentes le confirmaron que ese número telefónico ya ha sido utilizado en otros actos similares. “Me dijeron que ya hay una denuncia con ese mismo número, con las mismas frases, el mismo monto, las mismas palabras”, relató.

Mientras las investigaciones avanzan, la empresaria ha decidido no reabrir su negocio por seguridad, a pesar de que representa su única fuente de ingresos y la de sus trabajadores.