Casa que acoge a discapacitados se encuentra en peligro

Son una familia de seis apellidos distintos, todos son hijos del pabellón de niños del hospital psiquiátrico, Larco Herrera. En donde los abandonaron hace 50 años y de donde salieron siendo adolescentes gracias a chela. Son familia porque se llaman y sienten hermanos, porque viven como tal en esta una  de Pueblo Libre hace 23 años. Desde que chela les ayudó a ser ciudadanos con derechos en vez de enfermos parias, pero esto puede terminar.

Nunca fueron pacientes psiquiátricos, pero como tenían otras discapacidades no había otro sitio para ellos más que este pabellón de Larco Herrera. Aquí vemos a paulina, a Carlos, a Juan, a Laura, a Víctor encerrados aquí crecieron porque no había donde llevarlos. Hasta que llegó chela la psicóloga que hacía sus prácticas y que se empeñó en que tuvieran una vida y una casa con ventanas abiertas. 

Se fue becada a Suecia, vio como vivían las personas con sus mismas discapacidades y consiguió financiación para comprar esta casa a dónde se trasladaron los seis en 1994, ahí estuvo Chela y aquí está Chela con más años pero los mismos rulos.   

Esto fue y ha sido posible hasta ahora porque la asociación Hanopren que dirige Chela firmó un convenio en 1994 con Larco Herrera por el que el hospital se comprometía a asignar técnicas de enfermería que cubrieran sus necesidades las 24 horas, se comprometía también a darles víveres en seco y a pagar la luz y el agua.   

Por su parte Hanoprem se ha ocupado todos estos 23 años de mantener la casa, pagar los colegios, su transporte,  las terapias, su ropa,  de pagar al personal que cocina y limpia, una palta por aquí, un chocolate por allá. 

Desde el 2003 por cuestiones administrativas ningún director del Larco Herrera quiso renovar el contrato con Hanopren por miedo a problemas administrativos no había una casa así en todo el país.   

Pero eso sí,  ningún director les retiro la ayuda hasta ahora. El cuatro de octubre Chela recibió un aviso, se acabó decía el hospital, la alta dirección así lo ha decidido, y dicho y hecho desde el 18 de octubre no reciben víveres y desde esta semana se quedaron sin técnicas de enfermería, se quedaron a la buena de Dios para ducharse, para ir al baño, para comer, para tomar sus pastillas, para trasladarse.

Ayuda Hanoprem: banco Scotiabank cuenta en soles 071 – 71160063 / Código interbancario 009 – 249 – 200717160063 – 41.