Uno de los males, si cabe el término histórico, de las Selecciones Peruanas, ha sido el juego aéreo. La desconcentración en cada pelota parada le ha costado al elenco nacional perder encuentros en los que tal vez mereció mejor suerte.
Pero ya está dicho que de merecimientos no se ganan los partidos, sino con trabajo, y esto entiende y lo ha llevado a la práctica Pablo Bengoechea, quien intenta darle vuelta al déficit nacional.
Recordemos que era él, como asistente de Sergio Markarián, quien elaboraba las famosas jugadas preparadas. La más recordada, la que terminó en gol de Zambrano ante Argentina en las últimas Eliminatorias.
Ahora, ya como técnico absoluto, el uruguayo viene encontrando resultados en el balón detenido: 4 tantos por esa vía de los 7 que suma la Selección bajo su dirección, en 5 amistosos.
Veámos los tantos del elenco peruano que consiguió a través de la pelota parada.
Perú 3-0 Panamá
El segundo tanto, el de Christian Ramos.
Perú 2-0 Irak
Los dos goles: Callens y Zambrano.
Perú 2-0 Qatar
El primero, Calles otra vez.
Notemos un rasgo particular que se repite en la mayoría de estos casos, más allá de que hayan sido de tiro de esquina o tiro libre: el pivoteo.
Una idea tan simple y quizás la más antigua de las estrategias, si es llevada con efectividad, no hay defensa que la contrarreste pues el factor sorprersa acaba con toda planificación e, incluso, atención.
Y esta idea del pivot, la del cabezazo previo, sea en el primer o segundo palo, es la que viene practicando Bengoechea. Con sus múltiples variantes, hay en el jugador nacional la convicción de ir a buscar la segunda jugada. Hasta ahora resulta.