¿Por qué tu niño duerme con la boca abierta y cuándo es peligroso?
¿Es normal que un niño ronque fuerte? ¿Qué pasa si un bebé duerme con la boca abierta? Una especialista explica las causas de esta condición y cómo reconocer que necesita observación médica
¿Sabías que un niño no debería roncar ni dormir con la boca abierta? A menos que sea por causas de un resfriado; en realidad, la boca generalmente no está preparada para filtrar el aire, por lo que respirar por esa vía podría tener algunas secuelas.
¿Por qué hijo duerme con la boca abierta o respira por ahí?
De acuerdo a la Dra. Camila Palma, odontopediatra, la principal razón es porque tiene adenoides o amígdalas muy grandes, las cuales bloquean el paso de aire y lo obligan a abrir la boca para llenar sus pulmones y poder respirar.
Otras causas para que un niño o niña duerma con la boca abierta son rinitis alérgica, tabiques desviados o disposiciones genéticas, como mandíbula muy pequeña, patrones neuromusculares alterados, etc.
¿Por qué podría ser malo respirar por la boca?
“Porque una persona que respira por la boca está peor oxigenada y si esto sucede desde bebé, se altera el desarrollo físico y mental. Cuando un niño respira por la boca, su calidad del sueño es mala, afectando directamente su crecimiento y su desempeño durante el día”, explica la Dra. Palma en esta publicación.
¿A quiénes se les llama “respiradores bucales” y cómo los detectamos?
En el caso de los bebés, el diagnóstico es más difícil que en niños mayores, pero se puede observar ciertas acciones como por ejemplo:
- Que tengan la boca entreabierta
- Roncan o respiran fuerte
- Se despiertan a cada rato
- Babean mucho
- Suelen sufrir de infecciones respiratorias
- Son malos comedores o les cuesta masticar
En los niños más grandes se pueden notar ojeras, labios resecos, caras alargadas, hombros hacia adelante, nariz estrecha, paladar angosto, malas mordidas, bruxismo (apretar los dientes), talla o peso alterado, irritabilidad, hiperactividad, etc.
Recomendaciones
Si has notado las señales indicadas líneas arriba, lo primero que debes hacer es asistir a consulta con un pediatra para que te derive al otorrino pediátrico.
“Los otorrinos hacen exámenes para descartar obstrucciones en la vía área, recetan medicamentos o incluso, te pueden sugerir realizar una cirugía con el fin de mejorar su calidad de vida”, indica la especialista.
Ten en cuenta que en ciertos casos se necesitarán profesionales de diversas especialidades (otorrino, odontopediatra, ortodoncista, terapeuta de lenguaje, alergólogo, etc.) para determinar un tratamiento adecuado.
