Descubre por qué nos sonrojamos y cómo evitarlo
No te sientas mal, para Charles Darwin la “vergüenza” es lo que nos hace humanos
El sonrojarse es el resultado de estar avergonzado o estresado y es una experiencia que nos afecta a casi todos, incluso nos podemos ruborizar cuando estamos solos. Para el naturalista Charles Darwin, la “vergüenza” es lo que nos hace humanos.
¿Por qué te pones rojo cuando sientes vergüenza?
Frans de Waal, biólogo de la Universidad de Emory en Atlanta, cree que una de las más grandes lagunas en la teoría de la selección natural es la de explicar por qué entre todos los animales, los humanos somos los únicos que nos sonrojamos.
"No somos la única especie que tiene la capacidad de cambiar de color" dijo el científico a la BBC. "El calamar cambia de color igual que otros animales cuando están estresados o por un proceso hormonal. Pero los humanos somos los únicos que cambiamos de color como una expresión", explica.
Lo que ocurre cuando nos ruborizamos es que los vasos sanguíneos en nuestra piel se dilatan y permiten que fluya más sangre, lo que nos da el color rojo en el rostro, recoge el portal 20 minutos.
El sonrojarnos demuestra honestidad
“Así que tal como Darwin lo especuló afirma el investigador nos sonrojamos como una señal de que los humanos hemos evolucionado como una especie sumamente cooperadora, al menos comparada con otros animales".
Un estudio en 2009 realizado por psicólogos holandeses concluyó que cuando nos sonrojamos es más difícil mentir y a la vista de otros es una señal de que somos sensibles a la regla social que acabamos de infringir. Por eso los psicópatas no se sonrojan en absoluto. Con todo, si lo que deseas es no sonrojarte o hacerlo con menos frecuencia, aquí algunas sugerencias:
¿Cómo evitar sonrojarse cuando sentimos vergüenza?
- Recuerda siempre que no eres la primera ni la única persona en cometer un error y no serás la última.
- Detecta las señales y protégete: Cuando nos avergonzamos te sientes diminuto o enorme, o si te paralizas o huyes, independientemente de cómo te sientas, vale la pena recordar que la vergüenza es una forma de arrogancia. Relájate, ya que la gente está menos interesada en ti de lo que piensas.
- El hecho de que te sonrojes demuestra que eres humano. Los estudios muestran que las personas que se avergüenzan instintivamente nos inspiran confianza.
- Consuélate, mañana reirás: Tal parece que entre peor sea el ridículo que hagamos, mejor serán las historias que podremos contar.