Reino Unido: inició el funeral de Isabel II en Edimburgo
Las exequias contarán con la presencia de jefes de Estados y dignatarios de todo el mundo.
El rey Carlos III, acompañado por sus tres hermanos, encabezó este lunes la procesión que llevó el féretro de Isabel II hasta la catedral de Saint Giles en Edimburgo, capital de Escocia, donde los británicos comenzarán a despedirse de su reina.
Vestido con sus galas militares, el nuevo monarca de 73 años siguió a pie el coche fúnebre desde el palacio Holyroodhouse, en cuya sala del trono había pasado la noche, hasta el vecino templo de la iglesia de Escocia.
Sus hermanos Ana, de 72 años, y Eduardo, de 58 años, vestían también uniforme. Pero no así Andrés, de 62 años, considerado el "hijo predilecto" de Isabel II pero al que la propia monarca despojó hace meses de sus honores militares a raíz de acusaciones de agresión sexual a una menor en Estados Unidos, que se cerraron con un acuerdo extrajudicial.
Tras una ceremonia religiosa en la catedral de Saint Giles, en cuyo tejado se habían apostado francotiradores de la policía, se abrirá allí la primera capilla ardiente que durante 24 horas permitirá a los escoceses despedirse de su monarca.
Siguiendo la tradición, el rey y sus hermanos deben participar en una vigilia por la difunta reina, que permanecerá en la catedral de Edimburgo hasta la tarde del martes.
Entonces, un avión transportará sus restos a Londres para varios días de homenaje popular y el funeral de Estado, al que seguirá su entierro el mismo día en Windsor.
Se estima que unas 750 000 personas podrían querer despedirse de la monarca en la Abadía de Westminster, donde se prevén filas de hasta 8 km.
"Es probable que la cola sea muy larga. Tendrán que esperar muchas horas, a veces de noche y con pocas oportunidades de sentarse", advirtió el gobierno.
Las exequias de la soberana que vio pasar a 15 primeros ministros (el primero, Winston Churchill, nacido en 1874 y la actual, Liz Truss, nacida en 1975) contará con la presencia de decenas de dignatarios mundiales.
El estadounidense Joe Biden confirmó su presencia a un evento que también debe contar con la presencia del presidente brasileño Jair Bolsonaro, y representantes de las monarquías del mundo desde los reyes de España, Felipe VI y Letizia, hasta probablemente el emperador Naruhito de Japón.
Las autoridades británicas pidieron a los invitados extranjeros que utilicen "cuando sea posible" vuelos comerciales y no jets privados para viajar a Londres, donde se usarán autocares en lugar de helicópteros y automóviles personales para sus desplazamientos, según documentos del ministerio de Relaciones Exteriores.