Nicaragua cerró proceso electoral cuestionado por la oposición
Daniel Ortega y su esposa evitaron hablar sobre la baja participación que se observó en las mesas de votación
El presidente Daniel Ortega afirmó este domingo que Nicaragua culminó este domingo un proceso electoral sin confrontación, "inédito" en la historia del país centroamericano.
Las elecciones presidenciales y legislativas de Nicaragua finalizaron este domingo a las 18H00 locales (00H00 GMT), pero en aquellos centros de votación donde aún hay electores haciendo fila continuarán abiertos, anunció el presidente Daniel Ortega que opta por su segunda reelección consecutiva.
A pocos minutos del la hora prevista de cierre, Ortega y su esposa y compañera de fórmula, Rosario Murillo, acudieron a votar a la Junta Receptora de Voto, próxima a su residencia en Managua. El tribunal electoral prevé emitir los resultados de la votación a partir de las 21H00 locales (03H00 GMT).
"Este proceso electoral ha sido un proceso totalmente inédito, que le agrega un gran valor a la cultura electoral del pueblo nicaragüense", dijo Ortega tras depositar su voto en una junta receptora de votos cerca de su residencia en El Carmen, al oeste de la capital.
"Algunos decían que aquí como que no hay elecciones porque no nos estábamos insultando, porque no nos lanzamos mensajes de odio, porque no nos tocamos tambores de muerte, y gracias a Dios se logró ese milagro", indicó.
El mandatario, quien se postula para un cuarto mandato y tercero sucesivo desde el 2007 sin la participación de la oposición, llegó a votar minutos antes de que cerraran oficialmente las mesas de votación.
La oposición estima que entre el 70% y el 80% de los nicaragüenses se abstuvo de votar.
Ortega acudió junto con su esposa, la poetisa Rosario Murillo, quien corre como candidata a la vicepresidencia por el gobernante Frente Sandinista (FSLN, izquierda).
"Estamos concluyendo un día ejemplar de victorias, una elección histórica. Hemos avanzado contra esos sentimientos negativos que nos separan en Nicaragua", subrayó luego Murillo ataviada en un chal azul estampado sobre un vestido rojo.
La pareja presidencial no habló sobre la baja participación que se observó en las mesas de votación.
Los principales partidos de oposición, que fueron excluidos del proceso mediante lo que califican una maniobra de Ortega y en consecuencia llamaron a la población a abstenerse de votar.
(AFP)