Nicaragua: al menos dos muertos en ataque de fuerzas de Ortega en Masaya y Managua
Los dos muertes -un policía y un civil- ocurrieron en el barrio Monimbó, en el sur de Masaya, atacada con armas de alto calibre
Al menos dos muertos y una veintena de heridos dejaron este viernes ataques de fuerzas del gobierno en la ciudad de Masaya y en una universidad de Managua, mientras el presidente Daniel Ortega abogaba en un acto público por la paz en Nicaragua.
Los dos muertes un policía y un civil ocurrieron en el barrio Monimbó, en el sur de Masaya, "atacada con armas de alto calibre" por las fuerzas de Ortega, afirmó Álvaro Leiva, de la Asociación Nicaragüense pro Derechos Humanos.
"Hubo bastante resistencia, se les respondió con bombas de contacto (artesanales) y morteros. Tenemos un caído del pueblo y un policía que murió en el ataque, varios heridos", declaró por teléfono a AFP un dirigente opositor en Monimbó, pasado lo cruento del enfrentamiento.
En el suroeste de Managua, policías y paramilitares tenían sitiada, bajo constante ataque, la iglesia Divina Misericordia, donde están refugiados más de un centenar de estudiantes que estaban atrincherados en la Universidad Nacional Autónoma de Nicaragua (UNAN).
Unos 15 jóvenes están heridos, "algunos se están desangrando pero no podemos salir de aquí", dijo un médico a periodistas locales que también quedaron atrapados en la iglesia.
Escenas dramáticas se difundían en las redes sociales: "Vinieron todos con armas de fuego, a matar", aseguró un joven en la iglesia. "No podemos salir, estamos acorralados", gritó otro.
"Por favor ayúdennos", "Aquí morimos todos", "Mamá, perdóname, lo hice por mi patria", dijeron muchachos desesperados, agachados detrás de las trincheras, en videos que circularon más temprano en las redes, en los que se oyen disparos.
Los ataques ocurrieron durante una jornada de paro laboral con que los opositores exigen la salida de Ortega. Más de 270 muertos y unos 2.000 heridos deja la violencia desbordada en tres mes de protestas.
El secretario general de la OEA, Luis Almagro, y la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas, llamaron a un cese "inmediato" de los ataques. La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) pidió que se permita la entrada a misiones médicas para ayudar a los heridos.
El secretario de Estado adjunto para Asuntos del Hemisferio Occidental, Francisco Palmieri, y el embajador de Estados Unidos ante la Organización de los Estados Americanos (OEA), Carlos Trujillo, condenaron los ataques.
"Camino a la paz"
Mientras se registraba el ataque en Monimbó y zonas aledañas, Ortega culminaba el recorrido de una caravana que no pudo entrar a ese aguerrido barrio de Masaya, donde pobladores están atrincherados en resistencia al gobierno.
A bordo de una camioneta rodeada de escoltas, Ortega, junto a su esposa Rosario Murillo, llegó a la rebelde Masaya, 35 km al sur de Managua, tras cientos de vehículos y motocicletas de seguidores, para contrarrestar el paro.
"Invitamos a todos (…) a que tomemos el camino de la paz que es el único que nos va a dar tranquilidad", exhortó Ortega frente a la estación de policía de Masaya, fuertemente custodiado por policías y antimotines encapuchados, con quienes se tomó fotografías.
La caravana conmemoró el histórico "repliegue", una gesta guerrillera previa al triunfo de la insurrección popular que, encabezada por el Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN), derrocó al dictador Anastasio Somoza en 1979.
Los opositores acusan a Ortega, exguerrillero sandinista de 72 años que gobierna desde 2007 por tercer periodo consecutivo, de desatar una feroz represión contra las protestas y crear una dictadura con su esposa, marcada por la corrupción y el nepotismo.
Como salida a la crisis, la Iglesia Católica, mediadora en un diálogo entre el gobierno y la opositora Alianza Cívica por la Justicia y la Democracia grupos de la sociedad civil, propuso adelantar los comicios de 2021 a 2019. Pero Ortega lo descartó.
En Washington, en sesión de la OEA sobre Nicaragua, siete países presentaron un proyecto de resolución que exhorta a Ortega a apoyar elecciones anticipadas en acuerdo con la oposición.
Nicaragua paralizada
Mercados, bancos, tiendas, gasolineras, restaurantes y pequeñas ventas de comida no abrieron en ciudades y pueblos, en apoyo al llamado opositor, pero también por temor a saqueos o asaltos.
El paro de 24 horas, el segundo tras el del 14 de junio que dejó cuatro fallecidos, fue convocado por la Alianza Cívica, un día después de una gran marcha en Managua y manifestaciones en otras ciudades, con saldo de cuatro policías y un civil muertos en el municipio Morrito, en el sureste del país.
La policía detuvo este viernes al dirigente campesino Medardo Mairena, uno de los delegados opositores en un diálogo con el gobierno, al que acusó de "terrorista" y de ser quien "ordenó" el "ataque" contra los uniformados y el civil.
En la tercera jornada de presión de la Alianza, que condenó los ataques y la detención de Mairena, los opositores irán el sábado en caravana de vehículos por los conflictivos barrios orientales de Managua. (AFP)