Hoy:

    Expolicía estafó a colegas con falsa empresa de plantas naturales

    Un expolicía de confianza en su institución, aprovechó su posición para orquestar una estafa piramidal masiva que afectó a más de 300 personas, en su mayoría policías y sus familias

    Esta impactante historia expone cómo Rainer Alejandro Quinto, un expolicía de confianza en la Policía Nacional del Perú, aprovechó su posición para orquestar una estafa piramidal masiva que afectó a más de 300 personas, en su mayoría policías y sus familias.

    Durante cinco años, Quinto y su pareja, la también policía Erica Honorio Vidal, convencieron a colegas y conocidos de invertir sus ahorros en una falsa empresa de plantas naturales llamada "Natural Plant".  

    Entre las víctimas destaca Windy Matta, una suboficial de segunda que confió 45,000 soles en esta empresa fraudulenta.

    Al igual que otros, Matta inicialmente recibió algunas ganancias, lo que reforzó su confianza y la llevó a realizar una segunda inversión de la misma cantidad.

    Sin embargo, la mayor parte de su dinero fue desviada para costear el lujoso estilo de vida de Quinto, que incluía viajes y bienes de alto valor.

    Erick Ávalos, otra víctima y excompañero de Quinto, perdió 70,000 soles tras confiar en su promesa de duplicar o triplicar sus ganancias. Este fraude afectó tanto a su economía como a su vida personal, llevándolo incluso al divorcio. 

    Alejandra Miranda, una madre de un oficial de la policía, entregó 50,000 soles tras ser convencida por la apariencia exitosa y los testimonios de sus colegas. 

    Las falsas promesas de intereses y contratos oficiales conllevaban a las víctimas a reinvertir sus ganancias, en lugar de retirarlas, lo cual facilitaba la estafa en una estructura piramidal. 

    El fraude finalmente fue descubierto gracias al seguimiento de las autoridades, que documentaron el lujoso estilo de vida de Quinto, incluyendo propiedades en Lima y Pachacamac y una lujosa camioneta Land Rover.

    La intervención culminó con la detención de Quinto y Honorio. Aunque inicialmente se archivaron denuncias, la insistencia de las víctimas y la investigación policial llevaron a la captura de los implicados.

    La Fiscalía estima que la estafa alcanzó los 10 millones de soles, revelando la magnitud del daño financiero y emocional infligido, así como el profundo sentido de traición entre las filas de la policía.