Niños estudian en un cementerio en Piura
Los escolares reciben clases entre lápidas y bloques de concreto
Los estudiantes del colegio N.º 14254, en Ayabaca, Piura han tenido que adaptarse a una situación inusual y desgarradora: estudiar en la capilla de un cementerio. La infraestructura de su institución fue seriamente afectada por las lluvias torrenciales que cayeron en la sierra piurana, lo que provocó el colapso de algunas aulas y puso en riesgo la seguridad de los alumnos.
Escolares estudian junto a tumbas
Ante la falta de una alternativa, los más de 100 estudiantes del colegio, que comprende los niveles de primaria y secundaria, se ven obligados a asistir a clases en un ambiente improvisado, entre lápidas y bloques de concreto. La capilla, que anteriormente servía para oficiar misas, ahora es su único refugio. Allí, los niños se sientan en sillas plásticas, mientras una profesora utiliza un papelógrafo para enseñar, ya que la escuela no tiene pizarras.
El estado de la infraestructura del colegio es preocupante: las paredes y los techos están dañados, y hay un riesgo inminente de colapso. Las intensas lluvias y los deslizamientos de tierra han dejado a las aulas inhabitables.
Por su parte, los docentes y padres de familia han solicitado ayuda urgente a las autoridades locales y regionales para poder reubicar a los estudiantes en otro local escolar antes de que la situación empeore.