Crimen de estudiante: confesos asesinos relataron cómo fue el homicidio
Ana Lucía Carranza Chiara y Anibal Augusto Chalco Vilcapoma contaron cómo le arrancaron la vida a Luis Sergio Ramírez Santos
“Cuando un cuerpo muere empieza a botar aire, solamente le amarré el cuello para asegurarme de que no fuese a despertar”. Así de escalofriante fue la confesión de Anibal Augusto Chalco Vilcapoma, asesino confeso del estudiante de 19 años Luis Sergio Ramírez Santos.
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“Quería grabar ese mensaje (Luis Ramírez), porque sabía que iba a morir. Primero iba a llamar a un amigo para curarlo, estuve hablando con él, le dije: si quieres podemos salvarte pero luego pensé bien y dije tú me vas a delatar”, dijo Anibal Chalco en la reconstrucción del crimen.
Chalco planeó el asesinato junto a Ana Lucía Carranza Chiara, su enamorada y cómplice en la tortura y homicidio del joven. El 10 de marzo Luis Sergio se reencontró con Ana Lucía en la estación Los Jardines del tren eléctrico en San Juan de Lurigancho, habían planeado tener un supuesto encuentro sexual que se repetiría luego de algún tiempo.
“Luis Ramírez conoce por Tinder a Ana Lucia Carranza. Entablan conversación, luego deciden conocerse, se citan, según lo que refiere terminan manteniendo relaciones sexuales. Después la comunicación se corta, insiste no recibe repuesta y eso va creando resentimiento en Ana Lucía. El 9 de marzo entablan contacto, ella lo invita como la vez pasada y el accede”, reveló el general Miguel Núñez, jefe de la Dirincri.
Ellos se habían conocido un año atrás por medio de la aplicación Tinder, al principio hubo acercamiento pero al parecer ante el repentino desinterés de la víctima, ella decidió vengarse. Para eso llamó a su actual enamorado Anibal Chalco para que la ayude con el maquiavélico plan.
Según cuenta el asesino confeso, en la reconstrucción del crimen con los agentes de la Dirincri, fue una filuda espada el objeto con el que hirió de gravedad a la víctima, dejándolo indefenso.
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“Los dos lo han torturado, pero apenas ingresan a la habitación ella coge esta espada y le hace un corto profundo en el antebrazo. Le tomó una fotografía, lo asfixiaron y lo mataron”, contó el alto oficial de la Policía.