Las Fiestas Patrias no solo son días de celebración, sino un momento de profundo orgullo y unión nacional.
Este 28 de julio, el país conmemora sus 203 años de independencia, una ocasión que no pasa desapercibida entre los peruanos, dentro y fuera del país.
La familia Chamba Villegas, quienes emigraron del Rímac hace más de veinte años en busca de un mejor futuro, regresan al centro de Lima para disfrutar de estas festividades.
'Estamos de paseo, encontramos embellecida nuestra ciudad y queremos que siga adelante', comenta uno de sus miembros.
Las avenidas y calles emblemáticas del centro histórico, como el tradicional Jirón de la Unión, se visten de rojo y blanco, evocando nostalgia y emoción en los visitantes.
Don Vicente Rojas, un chalaco de corazón, deleita con su guitarra entonando música peruana, reflejando el espíritu festivo de estas fechas.
Además de las calles, instituciones públicas como el Palacio de Justicia y la Municipalidad de Lima también lucen orgullosamente la bandera nacional.
En lugares como Mesa Redonda y el Mercado Central, el comercio de banderas, escarapelas y otros adornos patrios se intensifica, con comerciantes satisfechos por la buena venta.
Tanto nacionales como extranjeros disfrutan de esta celebración, pidiendo paz, unión y mayor seguridad. Las Fiestas Patrias son una invitación a pintar de rojo y blanco los corazones y las calles, disfrutando junto a familiares y amigos del orgullo de ser peruano.
