El caso del búnker de Pachacámac, donde se encontraron a ciudadanos venezolanos con armas de fuego, granadas y abundante droga. Abrió las puertas a un escándalo dentro de nuestro sistema de justicia. El Ministerio Público liberó a 21 personas involucradas, uno de ellos, días después, disparó contra policías en un hecho lamentable de sangre. El Poder Judicial luego liberó a 7 personas con toda su implicancia dentro del Tren de Aragua.
Fue un día donde todos aplaudimos el éxito de un operativo policial, el búnker de Pachacámac era el escenario del desenfreno. Al menos 28 personas de nacionalidad venezolana habían alquilado la vivienda de Villa Mora para celebrar el cumpleaños de alias Lucio. Yeikor Alejandro Sánchez Sánchez saboreaba las plazas de explotación sexual que había conseguido por orden directa del niño guerrero. La facción a la que pertenece y que se resiste a desaparecer es de los hijos de dios.
El pasado 21 de noviembre numerosas divisiones de la policía llegaron por aire, por tierra. Utilizando todos los mecanismos de inteligencia para capturar al número uno y a toda su red criminal. El objetivo sacarlos de circulación y evitar que sigan vulnerando la tranquilidad de todos los peruanos.
Es el documento de la Fiscalía Penal Corporativa de Lurín. Con fecha 4 de diciembre. Con la finalidad de remitir las actas de libertad de 21 de los investigados. Uno de ellos José Antonio Ríos Gil. El perfil es el mismo. Un gatillero venezolano que no le tiembla la mano con tal de aferrarse a los planes que le encomendaron. Esto fue lo que dijo en el búnker de Pachacámac.
De taxista no tenía nada, era diestro con las armas que uso en contra de jóvenes policías en un hostal de San Juan de Lurigancho. A tan solo días de haber obtenido su pase de libertad por decisión del ministerio público.
Martes 12 de diciembre, 5:21 de la tarde. Hombres uniformados ingresan al inmueble. Un grupo de avanzada sube para empezar con la detención de los Hijos de Dios. Mientras que otro grupo de policías aguarda en el primer piso. Con vista privilegiada, los sujetos se alarman por la presencia de los agentes. Tienen que deshacerse de los morrales que llevan puestos, pues ahí esconden todas las armas.
Mientras la confusión está con el sujeto adolorido en plena calle, el hombre de polo azul baja ahora sin el morral como si nada. Pues los jóvenes policías ya tenían ubicado el cuarto de acogida, cuando son repelidos a balazos. Por el siniestro personaje de José Antonio Ríos Gil que se encontraba escondido en dicha habitación.
Los policías se arrastran, tienen heridas de consideración, en una escena de sangre. A pesar de tener la mano derecha inservible, el policía utiliza su mano izquierda y pide que se detengan cuando responde con disparos a su atacante. Los segundos pasan y pierde mucha sangre y es apoyado por más efectivos que ponen fin a toda una estructurada organización criminal.
A raíz de este lamentable suceso, diversas autoridades mostraron su preocupación desde el hospital de la policía. El ministro del Interior, Víctor Torres y la presidenta de la república, Dina Boluarte. Desmembrar toda cúpula criminal debería ser una preocupación latente en todas las esferas de poderes autónomos del Perú. Policías que reposan una pronta recuperación de lo que pudo ser una nueva tragedia.
Si el ministerio público tiene aún mucho que aclarar por la liberación de un grupo de 21 personas implicadas en tantos delitos. El Poder Judicial no se queda atrás. Es decir, no deben cambiar de domicilio que aseguraron tener durante la audiencia de prisión preventiva. Firmar cada 90 días para demostrar una conducta responsable y no volver a cometer hechos delictivos.
Es la jueza de investigación preparatoria de Pachacámac, la abogada Leny Zapata Andía. Tenía a solo 7 de los integrantes de los hijos de dios del tren de Aragua y tomo una decisión que le costaría el cargo. Cuestionable resolución que llevo al Poder Judicial a tomar la decisión de quitarle la confianza para el ejercicio del cargo. Disponen que entregue el inventario como las credenciales otorgadas para sus funciones.
Tras la captura de Wanda del Valle Bermúdez. Otro juez del Séptimo Juzgado de Investigación Preparatoria de Santa Rosa. Resolvió declarar improcedente el requerimiento de extradición de la Bebecita del Crimen. Solicitado por el Ministerio Público por el delito de conspiración y ofrecimiento de dinero para acabar con la vida del coronel Víctor Revoredo, jefe PNP de Homicidios.
Horas después, la presidenta de la Corte de Justicia de Lima Este decidió separar del cargo al juez Alfonso del Carpio Delgado, asegurando que se va a continuar con el pedido de extradición de Wanda del Valle que sigue en Colombia.