Asesinan a narcotraficante en notaría de San Isidro

Ingresa tranquilamente a esta notaria, busca a objetivo quien se encuentra en el segundo piso, al verlo empuña su arma y fríamente lo acribilla para luego huir. Según la investigación policial la víctima era cabecilla de una organización dedicada al narcotráfico, Javier Poemape Chávez, quien hace más de 20 años estuvo en prisión por tráfico ilícito de drogas, vinculado también al caso Gerald Oropeza.

Sumergido en varias investigaciones fiscales, por presuntamente ser parte de una mafia que se dedica al envió de droga desde el puerto del Callao a Europa y Estados Unidos.

Roger Javier Poemape Chávez de 51 años, tiene un largo camino en el mundo policial, un hombre que, desde el 1999 venía siendo investigado por la justicia. Nació en Bellavista, Callao, pero su ficha Reniec señala que radicaba en Condado del Rey, Panamá, un país conocido como el paraíso fiscal, vivía en una céntrica y comercial.

“Javi” como lo conocían empezó como promotor de eventos, realizando conciertos de salsa en el Callao con reconocidos cantantes extranjeros que trajo al Perú.

En 1999 fue detenido bajo el delito de elaboración acopio traslado acondicionamiento, transporte instalación de laboratorios para la transformación de esta droga a clorhidrato de cocaína. Aquella vez, la policía hallo un minilaboratorio para procesar heroína. Estuvo en el penal Miguel Castro Castro, pero luego de 3 años salió en libertad tras ser absuelto por la justicia.

Y en el año 2006 más cayó una vez más, vinculado al hallazgo de media tonelada de cocaína camuflada en planchas de triplay, que según investigación fiscal le pertenecía al aquel entonces alcalde de Pucallpa, Luis Valdez Villacorta.

Tras ser detenido en abril de ese año Julio Cesar Gamboa Bazalar, encargado del acondicionamiento de la droga, narró a la policía sobre la participación que tenía Javier Poemape Chávez con la droga incautada. Según Bazalar, Poemape era coordinador del envío de 561 kilos de cocaína.

Sospechosamente este sujeto luego cambio su versión, señalando que había sido torturado. La policía lo tenía en la mira, por pertenecer a redes internacionales de narcotráfico, era sindicado como cabecilla en nuestro país. Un escurridizo sujeto que burlaba a la justicia, aquí se le ve caminando por las inmediaciones de la corte del Callao, el 3 de octubre del 2007, y cuando al fiscaliza lo citó para el 10, es decir 7 días después Poemape nunca se presentó señalando que estaba fuera del país.

El 2015, la dirección antidrogas de la policía lo incluyó en una investigación junto a Gerald Oropeza por tráfico ilícito de drogas, se investigaba quienes tenían el control de la droga en el puerto chalaco. Estuvo involucrado también en el caso Rodolfo Orellana Rengifo, investigado además por las amenazas de muerte contra la procuradora Sonia Medina.

Javier Poemape, viajaba constantemente al extranjero, en su movimiento migratorio señala que su último viaje lo realizó el 5 de diciembre del año pasado, y regresó el 22, un día después de celebrar su cumpleaños número 51 en España. Tiene innumerables viajes desde el 2006 a Ecuador, Colombia, Estados Unidos, Chile, Argentina, Holanda, Brasil, Bolivia, y casi todos a Panamá.

Su padre Óscar Rafael Poemape Tander también estuvo vinculado al tráfico ilícito de drogas. En el 2015 fue detenido a sus 65 años, Al tener una orden de captura emitida por la Primera Sala Penal Corporativa del Callao. Según la policía, Óscar Poemape tiene siete procesos judiciales por tráfico ilícito de drogas en distintos juzgados, 37 requisitorias suspendidas por narcotráfico y otras cuatro anuladas por robo y falsificación. Estuvo preso en Chile por tráfico de drogas hasta el 2007, que fue extraditado al Perú y luego absuelto.

Aquel día, Javier Poemape, llego a una notaría a realizar unos trámites junto a su esposa. Aquí se les ve conversando tranquilamente, pero alguien ya lo tenía en la mira. En estas cámaras de seguridad se ve como un sicario llega a este lugar. Camina muy despacio, se sienta unos minutos en la entrada de la notaria Velarde Sussoni, lleva una gorra para ocultar su rostro y ropa oscura. Sube al segundo piso, con las manos en los bolsillos. Al encontrar a Javier Poemape, empuña su arma y fríamente le dispara, la victima intenta esquivar las balas, pero una de ellas impacta a su pareja, quien cae al suelo. El sicario persigue a su objetivo hasta acabar con su vida, mientras todos corren asustados.

Luego el asesino huye rápidamente del lugar, en la puerta lo esperaba su cómplice en una motocicleta. En la escena del crimen se encontraron 14 casquillos de bala, 9 de ellos impactaron Poemape, uno a su esposa y otra a una persona que estaba en el lugar.

Según información policial se trataría de un ajuste de cuentas, pues al parecer Poemape, se había convertido en informante de la justicia, al enterarse de esto, los miembros de la organización, acabaron con su vida. Otra de las hipótesis es por el frustrado envío de más de tres toneladas de cocaína, al extranjero valorizada en 140 millones de dólares

La división de homicidios de la Dirincri viene investigando el caso, para determinar quien o quienes planearon acabar con la vida de Javier Poemape, y cual habría sido el móvil de este feroz asesinato