El uruguayo Robert Carmona cuenta, a sus 55 años, con el récord Guinness por ser el futbolista más longevo del mundo y agrandó recientemente su registro, al firmar un contrato hasta el final de la presente temporada con el club italiano Audax Orione.
Carmona obtuvo el récord porque lleva más de 40 años jugando al fútbol en clubes de federaciones afiliadas a la FIFA y, en su larga carrera, hasta llegó a medirse con el argentino Diego Armando Maradona, explicó hoy el uruguayo en conversación con Efe.
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El veterano media-punta espera con ansiedad su debut con el Audax Orione, que milita en las categorías menores italianas, un equipo al que llegó tras pasar por varios países sudamericanos, Estados Unidos y también España, donde jugó en el Club Deportivo Inter Ibiza.
"El fútbol me permitió conocer el mundo", subraya Carmona, que gracias a este deporte hasta logró entrar en las ligas semi-profesionales estadounidenses y jugar en ciudades icónicas como Nueva York o Miami.
Su carrera profesional empezó a los 15 años en el club uruguayo Pan de Azúcar, con sede en Maldonado, y de allí recorrió el mundo y, a pesar de no llegar a conquistar grandes trofeos, Carmona se siente agradecido y orgulloso por lo que el fútbol le regaló.
"No se necesita jugar en grandes ligas o ser millonarios para lograr grandes cosas. Obviamente me hubiera gustado jugar en el Real Madrid o en el Barcelona, pero para mí lo más importante es confiar en tus capacidades y el profesionalismo", aseguró a Efe.
Entre las grandes satisfacciones que le dio el fútbol, está el encuentro con Maradona, una leyenda con la que Carmona tuvo la posibilidad de charlar y hasta entrenarse durante su etapa en Argentina.
"Estuve 4-5 meses en Argentina y conocí a Maradona, que en ese momento vivía allí. Compartí con él partidos amistosos y absorbí toda la mejor información futbolística. No es algo que pasa todos los días", recuerda con orgullo el uruguayo.
A esta prestigiosa experiencia se suma la que permitió a Carmona confrontarse con una estrella absoluta del fútbol uruguayo como Alcides Ghiggia, el símbolo del Maracanazo y de la victoria del Mundial 1950 por parte de la selección charrúa contra Brasil.
"Fue uno de los pilares de Uruguay. Compartí con él sus consejos, almuerzos, cenas. Era muy amable. En el fútbol en Uruguay nos conocíamos todos", afirmó.
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Temporada tras temporada, Carmona dejó atrás los récords de leyendas como el exguardameta del Lazio Marco Ballotta, que jugó hasta los 44 años, o el británico Stanley Matthews, que se retiró a los 50 años, y no planea alejarse del deporte que le acompañó durante toda su vida.
Mantenerse en forma hasta superar los 50 años es un reto complicado, pero el uruguayo explicó que siempre se centró en "la constancia, la conducta, la entrega y la alimentación saludable" y que eso es parte indispensable de su "receta" para conseguirlo. EFE
Alireza Beiravand, el portero de Irán que sufrió un duro golpe en el encuentro contra Inglaterra, cuenta con el récord Guinness de saque con la mano más largo
El récord lo tenía anteriormente el israelí Isaak Hayik, de 73 años
