Argentina y Alemania disputarán el domingo en el legendario estadio Maracaná su tercera final, la más jugada en la historia de los Mundiales.
El primer choque finalista se produjo en México 86 con triunfo argentino por 3-2 en el estadio Azteca.
Ese fue el Mundial de Diego Maradona, pero la figura argentina no marcó en la final, sino que anotaron el defensa José Luis Brown, el delantero Jorge Valdano y el centrocampista Jorge Burruchaga.
Karl-Heinz Rummenigge y Rudi Völler marcaron para Alemania.
La Mannschaft se tomó revancha por 1-0 en el siguiente Mundial, en Italia 90, con un polémico penal convertido por Andreas Brehme.
La formación sudamericana jugó hasta ahora cuatro finales, de las cuales ganó dos (Argentina 78 y México 86), mientras que Alemania disputó siete con tres coronaciones (Suiza 54, Alemania 74 e Italia 90).
El domingo la Mannschaft jugará su octava final y se convertirá en la selección con más partidos definitorios disputados, superando a Brasil que acumula siete.