Alessandro Burlamaqui presente en la derrota 2-0 del Valencia ante Zaragoza

El Real Zaragoza infligió al Valencia, que contó con el peruano Alessandro Burlamaqui desde los 67', su primera derrota (0-2) de la pretemporada en un partido en el que fue mejor y más efectivo, con dos goles casi calcados en la primera mitad, mientras que al equipo valencianista le faltó creación de juego y tampoco estuvo acertado en defensa en los tantos del rival.

El encuentro supuso el estreno en pretemporada de Gayà y Maxi Gómez, mientras que el déficit de medioocampistas que tiene José Bordalás provocó que juntase en la medular a Hugo Guillamón y al canterano Javi Guerra, de apenas 18 años.

Pese a tratarse de un amistoso, ni el Valencia ni el Real Zaragoza quisieron arriesgar más de la cuenta en el arranque del choque. Para el Zaragoza fue la primera ocasión del partido, con un buen remate de cabeza de Iván Azón en un córner que paró en dos tiempos el meta Cristian Rivero (14).

El equipo de Juan Ignacio Martínez era claramente mejor sobre el campo y salía sin demasiados apuros de la presión en campo contrario del Valencia. Fruto de una de esas buenas combinaciones llegó el primer gol, de Narváez, que aprovechó una asistencia desde la derecha de Bermejo tras una gran triangulación ofensiva.

El plan de Bordalás no cambió. Insistía el Valencia en robar la pelota lo más cerca posible de la portería de Cristian Álvarez, pero el Zaragoza, confiado con el gol a favor, no cometía errores y pasado el ecuador de la primera parte ni Guedes ni Maxi Gómez habían participado de forma eficiente en el juego de su equipo.

Apareció Guedes con una jugada individual a falta de diez minutos para el descanso, pero su zurdazo se marchó muy alto. Maxi también tuvo la suya, con un cabezazo a bocajarro, pero antes el Zaragoza, y en una jugada calcada a la del primer gol, había marcado el 0-2 (45) gracias a Fran Gámez.

El Valencia salió a la segunda parte dispuesto a remontar por tercera vez esta pretemporada. Sin embargo, fue de nuevo Cristian Rivero el que tuvo que emplearse a fondo con un lanzamiento desde la frontal de Adrián González, que fue una de las numerosas novedades en ambos equipos tras el paso por los vestuarios.

La falta de creación en el centro del campo valencianista era evidente. Tampoco por las bandas podía imponerse el Valencia ante un Zaragoza muy ordenado pese a la marcha del campo de Igbekeme, que estuvo sobresaliente durante todos los minutos que disputó.

El último cuarto de hora apenas tuvo ritmo, con un Valencia volcado en campo rival pero sin claridad ni profundidad y con un Zaragoza que a punto estuvo de marcar el tercero y que se llevó una merecida victoria que significa la primera derrota del cuadro de Bordalás en la pretemporada. EFE