¿Por qué salen "bolitas" alrededor del pezón?
Una ginecóloga te explica que son esos "granitos" que aparecen alrededor del pezón, si es normal que unos sobresalgan más que otros y por qué son tan importantes si estás lactando
Probablemente al revisar tus senos hayas notado unos pequeños "bultos" o "granitos" alrededor del pezón y te preguntes si es una característica normal o debes preocuparte por tu salud. En realidad, se tratan de unas glándulas que tienen una función importante en esa área de tu cuerpo.
La Dra. Alejandra Andrino, ginecóloga y obstetra, explica que esos bultitos en el pezón reciben el nombre de glándulas de Montgomery o tubérculos de Montgomery.
Estas son glándulas sebáceas que tanto hombres como mujeres tienen en las areolas, la parte de la piel de color oscuro que rodea el pezón de la mama. Por cada areola podemos encontrar entre 10 y 20 glándulas.
“La función de estas glándulas es la de mantener hidratada esa zona, es decir, produce secreciones sebáceas que mantienen la areola y el pezón lubricados y protegidos”, señala la especialista.
Además, estos “granitos” en el pezón, al producir aceites naturales, ayudan a controlar el pH y protegen dicha zona ante cualquier tipo de infección bacteriana.
¿Es normal que algunos de esos bultitos en el pezón sean más notorios que otros?
La Dra. Andrino indica que la apariencia de estas glándulas puede cambiar en torno a dos situaciones totalmente normales: en el embarazo y por algún estímulo exterior.
“En el embarazo toman la apariencia de unas ‘pelotitas’ que sobresalen de la piel de la areola, por lo que se notan más en algunas mujeres. En quienes no estamos embarazadas sobresalen más cuando el pezón se estimula o tenemos frío”, aclara.
¿Por qué las glándulas de Montgomery son importantes durante la lactancia?
El Dr. Nelson Ramos, médico del portal Mejor con Salud, indica que estas glándulas disminuyen la probabilidad de presentar lesiones, gracias a que mantienen dicha zona bien lubricada durante la lactancia.
“En definitiva, si se lava el pecho en exceso se anula el efecto de las glándulas areolares o de Montgomery, por lo que el pezón está más reseco y el riesgo de grietas o dolor al amamantar aumenta. Con una ducha normal basta para mantener la higiene diaria”, agrega el doctor.
Es importante resaltar que las glándulas de Montgomery no deberían producir ningún tipo de malestar, dolor o inflamación; de lo contrario, podría tratarse de un tema dermatológico u otras afecciones. Lo mejor será visitar a un especialista de la salud.