¿Por qué se produce excesiva saliva y cuál es el tratamiento?
El tialismo es una enfermedad bucodental que se caracteriza por un babeo continuo o crónico. Te explicamos cuáles son las causas y cómo prevenir
¿Sufres de salivación excesiva? Te contamos que esta enfermedad se llama ptialismo y es conocida coloquialmente como babeo crónico. Esta condición puede causar inconvenientes como el mal aliento.
Se dice que la producción normal de saliva diaria es de 1,5 litros. Este líquido es importante para mantener la hidratación de la boca, facilitar la masticación y ayuda a prevenir la caries.
Las causas del tialismo: ¿Por qué se produce excesiva saliva o hay dificultad para tragarla?
- Se puede dar por el consumo de medicamentos como el betanecol, el carbacol, la pilocarpina, la epinefrina, la terbutalina, el clonazepan o los compuestos yodados.
- Padecimiento de una enfermedad neurológica como: parkinson, parálisis cerebral, parálisis del nervio facial, esclerosis lateral amiotrófica (ELA), secuelas de un infarto cerebral o de un traumatismo cerebral grave.
- El exceso de saliva también puede ser causada por la colocación de una prótesis o el dolor dental.
¿Cómo reconocer que sufres de babeo crónico?
- Descamación de los labios
- Dermatitis en el mentón
- Fatiga muscular facial por el esfuerzo de tener que tragar la saliva constantemente.
- Alteración en el sentido del gusto.
Mira también: [¿Por qué babeas al dormir y cómo evitarlo?]
Tratamiento del ptialismo
Si se da por el consumo de un fármaco, el especialista será quien recomiende retirar el medicamento y lo sustituirá por otro que no provoque hipersalivación.
Si ningún tratamiento funciona, existe la posibilidad de extraer parte de las glándulas salivales mediante cirugía o ligar los conductos a través de los que se libera la saliva.
Prevención
Si el ptialismo es causado por fármacos o una enfermedad neurológica, las medidas de prevención puede que no funcionen. Pero, hay algunas pautas recomendadas para evitar el exceso de saliva:
- Cepilla tus dientes de manera regular.
- Usa enjuague bucal.
- Bebe agua con frecuencia a pequeños sorbos.
- Consume alimentos saludables y evita los que son ácidos o ricos en almidón, ya que favorecen la salivación.
- Chupa caramelos sin azúcar.
- Duerme las horas necesarias, ya que el descanso ayuda a reducir el flujo de saliva.
Con información de la Vanguardia