5 formas de protegerte de las variantes de COVID-19 tras vacunarte

En las últimas tres semanas se viene registrando un incremento de casos de la covid-19 en el país, lo que ha generado un aumento a su vez en el número de pacientes hospitalizados y en camas UCI, alertó el ministro de Salud, Hernando Cevallos.

En ese sentido, ¿cómo debemos protegernos de las variantes de la COVID-19, incluso estando vacunado? La mejor barrera es el buen uso de la mascarilla. Pero, hay que tomar en cuenta estos cinco puntos claves para reducir el riesgo de contagio:

1) Mascarillas con un buen filtro

José Luis Jimenez, académico coautor del artículo científico “Transmisión aérea de virus respiratorios”, indica que la función de las mascarillas es ser un filtro eficiente de todo el aire que inhalamos y exhalamos.

Esto es importante ya que muchos aerosoles, y los virus que pueden contener, deben quedar pegados en las fibras de la mascarilla. Así no los inhalamos o, si estamos contagiados, no los exhalamos hacia el exterior.

Es por ello que el especialista recomienda las mascarillas FFP2, N95 o KN95, las cuales cuentan con un buen filtro, sobre todo para actividades en las que uno habla, canta o grita constantemente, porque es ahí donde los virus salen hasta 10 a 50 veces más.  

2) El ajuste de la mascarilla sobre tu rostro

Jimenez menciona que, al tener puesta una mascarilla, es muy frecuente que por el área de la nariz y las mejillas se escape hasta el 50% del aire que respiramos sin filtro alguno.

Por ende, “una mascarilla bien ajustada, como sabe el personal de salud, te deja marca en la cara. Esa es la señal de que se ajusta bien”, menciona el especialista en una publicación para sus redes sociales.

Aquí te dejamos recomendaciones de los expertos para mejorar el ajuste de la mascarilla:

3) Evitar usar únicamente mascarillas quirúrgicas

Si bien las mascarillas quirúrgicas tienen un buen filtro, estas no están pensadas para ajustarse bien a la cara. Los expertos no la recomiendan, más aún si se usan solas. NO previenen el contagio.

Solo se recomienda si se usa algún otro sistema para mejorar el ajuste, como una mascarilla de tela encima y bien adherida a la cara, por ejemplo.

4) Usar mascarilla con barba es un error

Las mascarillas no se ajustan bien sobre la barba. Parte del aire inhalado o exhalado pasa sobre el vello facial y no es un buen filtro, sobre todo si la mascarilla no está muy ajustada.

Manuel Chávez, químico del INS, explica que el espacio libre entre dos pelos de la barba es de 1.1 a 2.7 milímetros, lo que equivale a 1000 veces el tamaño de una partícula de aerosol que podría contener al virus del SARS-COV-2.

Por su parte, los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC) de los EE.UU. recomiendan una serie de estilos de afeitados compatibles con la mascarilla, como los bigotes laterales, estilo zorro o en cepillo.

5) Mucho cuidado con las mascarillas de tela

Las mascarillas de telas son muy variables en su calidad, muchas de ellas filtran poco el aire y suelen dejar muchos huecos. La peor de sus modalidades es la bandana, la cual está demostrado que NO ejerce una buena protección.

Según los CDC, la eficacia depende del tipo de tejido utilizado y del número de capas de tejido, por lo que las mascarillas de tela pueden tener tan solo un 26% de efectividad.

Ante la propagación de variantes de la COVID-19 más resistentes, los expertos recomiendan evitar su uso; sin embargo, si no existe alguna otra opción, puede usarse una mascarilla de tela con una quirúrgica por debajo, bien ajustada al rostro.

Recuerda que si bien el buen uso de las mascarillas nos protege de las variantes, es necesario mantener todos los espacios con buena ventilación y, sobre todo, recibir las dos dosis completas de la vacuna contra el coronavirus.