Duro inicio de año para los venezolanos por la crisis económica

Luis Briceño abrió esta pequeña fábrica hace 25 años en Caracas. Con ella construyó su patrimonio, pero tras un comienzo de año difícil, piensa en cerrarla.

El empresario considera que el incremento de 40% del salario mínimo decretado por el presidente Nicolás Maduro el 31 de diciembre solo complica todo.

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"De verdad yo no sé ni cuánto es el aumento, ni se dé cuando eso, nada. Lo que sí te puedo decir es que me parece criminal, porque hasta los propios obreros le preguntan tú quieres que te aumente el sueldo, el salario mínimo por parte del Gobierno y te dicen que no, porque al día siguiente, al día siguiente aumenta todo", dijo Briceño.

El empresario, de 70 años, sabe que los próximos meses serán críticos para su empresa, debido a la falta de insumos y la hiperinflación, que según el FMI llegará a 2.350% en 2018. Pero también porque dos de sus tres empleados piensan emigrar.

Reajustado seis veces en 2017, el salario mínimo integral, que incluye el sueldo más un bono de alimentación, representa unos 238 dólares a la tasa oficial, pero solo seis a la del mercado negro.

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"Ese salario, sabe, no alcanza para nada, eso es un engaño para la gente, ese salario es para puro engañar y para que la gente crea que están haciendo bien, pero eso no es nada", dijo Wiliam Pérez, un habitante de Caracas.

"Me da más tristeza que otra cosa, porque veo muchos negocios cerrando y que no van abrir y nuestra selección se está reduciendo", dijo Raquel Benarroch, otra habitante de Caracas.
Por la inflación, con el ingreso básico se pueden comprar apenas 30 huevos, un kilo de carne, uno de azúcar y otro de cebolla.

Según las principales universidades venezolanas, la pobreza alcanzó 30,2% y la pobreza extrema 51,5% en 2016. El gobierno de Venezuela las ubica en 18,3% y 4,4%. (AFP)