Colombia: general Rubén Darío Alzate pidió la baja del Ejército
En su primera aparición pública, el oficial admitió no haber seguido el protocolo de seguridad militar durante una visita al caserío Las Mercedes.
El general liberado por las FARC en Colombia, cuya captura provocó la suspensión del proceso de paz con esa guerrilla comunista, pidió este lunes al gobierno su pase a retiro de las fuerzas militares.
"Por mi honor militar, como primera virtud del soldado que he respetado sirviendo por más de 33 años de entrega y desprendimiento a nuestra patria, y por el amor y respeto a nuestra institución militar, que por este hecho se ha visto afectada, he solicitado al gobierno nacional mi retiro del servicio activo", dijo el brigadier general del Ejército Rubén Alzate, visiblemente emocionado.
En su primera aparición pública luego de su liberación el domingo, el militar atribuyó a razones de servicio comunitario su recorrido de civil y sin escoltas el domingo 16 por el caserío Las Mercedes, ubicado a orillas del río Atrato en el selvático departamento de Chocó (oeste), donde fue retenido por guerrilleros del Frente 34 del bloque Iván Ríos de las FARC.
Alzate, el oficial de más alto rango capturado por las FARC en 50 años de conflicto armado, admitió haber cometido errores en el protocolo de seguridad militar durante su visita, vinculada según dijo a un proyecto de energía alternativa gerenciado por la abogada Gloria Urrego, retenida junto a él al igual que el cabo Jorge Rodríguez.
La captura de Alzate y sus acompañantes llevó al presidente Juan Manuel Santos a suspender los diálogos de paz que adelanta con las FARC en La Habana, sin un cese al fuego en Colombia, para poner fin a un conflicto armado de medio siglo.
Alzate, un condecorado oficial de 55 años, no iba vestido de militar ni portaba armas para fortalecer la confianza de la población de esa zona pobre y remota del país.
"Nos secuestraron en total estado de indefensión", dijo el general al relatar la captura que atribuyó a cuatro hombres armados con fusiles encabezados por el guerrillero de las FARC alias Chaverra.
El general contó que durante los 14 días de su cautiverio fue esposado, amarrado durante las noches, y obligado a marchar de más de ocho horas diarias a través de las selva. Incluso, dijo, recibió amenazas de muerte en caso de intentar escapar.
Además, denunció haber sido "forzado a ser parte de un show mediático" por parte de las FARC, en alusión a la divulgación de una foto en la que aparece abrazado al jefe del bloque Iván Ríos, alias Pastor Alape, que provocó una fuerte polémica este lunes en Colombia.