Hoy:

    'Chalecos amarillos': el incierto perfil de quienes generan caos en París

    En varios barrios de la capital francesa se registraron disturbios y se detuvieron a 380 personas

    'Chalecos amarillos' en París. Foto: AFP
    'Chalecos amarillos' en París. Foto: AFP

    Militantes aguerridos, "chalecos amarillos" indignados o pequeños delincuentes. Los autores de los altercados y degradaciones del sábado en París presentan perfiles muy diversos que no permiten generalizar, según testimonios recogidos por la AFP.

    Tras las escenas de caos en varios barrios de la capital francesa, el ministro del Interior, Christophe Castaner, denunció una "estrategia organizada por profesionales del desorden, profesionales de los destrozos".

    "No son chalecos amarillos, los utilizan para camuflarse. Son únicamente agitadores que vinieron para confrontarse con las fuerzas de seguridad", declaró su secretario de Estado, Laurent Nuñez.

    En los barrios acomodados de la capital francesa, en los que se instaló un ambiente insurreccional, la realidad no resultó tan sencilla, según comprobaron periodistas de la AFP.

    Además de los habituales agitadores urbanos, también participaron en las degradaciones miembros de los "chalecos amarillos", un movimiento de indignación transversal organizado a través de las redes sociales que inició sus protestas el 17 de noviembre contra el aumento de los impuestos sobre el combustible, aunque expresa un malestar más profundo.

    Varios miembros de los "chalecos amarillos" se confrontaron con las fuerzas de seguridad y ellos mismos construyeron barricadas para detener su avance.

    Muchos de ellos eran personas de unos 30 años, procedentes de todo el territorio francés, equipados con gafas para esquiar y máscaras protectoras, no muy politizados pero dispuestos a cometer actos violentos para protestar contra la política del gobierno francés.

    "Esta respuesta es legítima, ya que se trata de la respuesta al silencio de Macron", se justificaba Chantal, de 45 años, que vino de Lorena, en el este de Francia, con su marido y sus dos hijos.

    "Todos los meses terminamos con 500 euros en negativo en nuestra cuenta bancaria. Hace tres años que no podemos hacer vacaciones", añadió.

    380 detenidos

    En cambio, otros miembros de los "chalecos amarillos", entrevistados por la AFP, sí que condenaron los disturbios, ya que consideran que perjudican su causa.

    Según fuentes policiales, a su lado también había militantes mucho más experimentados, procedentes tanto de la izquierda radical como de la ultraderecha, y que pretendían hacer frente a las fuerzas de seguridad.

    La mayoría de ellos tenían experiencia en confrontaciones con la policía o en técnicas para incendiar barricadas o vehículos.

    Cuando la policía lanzaba granadas lacrimógenas, daban consignas a los manifestantes de que no tuvieran miedo y de que no "empezaran a correr", comprobaron los periodistas de la AFP.

    El procesamiento judicial de las 380 personas que fueron detenidas servirá para conocer con mayor detalle el perfil de aquellos manifestantes implicados en los incidentes violentos del sábado.

    AFP

    LEE: Francia: matan a golpes a niño por negarse a hacer sus tareas