Jennifer Lopez contó por qué actuar con Shakira fue la peor idea del mundo

La presentación de Jennifer López y Shakira en el intermedio del Super Bowl en 2020 fue uno de los eventos más espectaculares del mundo ese año, pues en medio de la pandemia, las estrellas hicieron brillar a todos. 

Pero ¿Qué pasó detrás de esa gran producción? Jennifer estrenó su documental Halftime durante la inauguración del Festival de Tribeca en Nueva York. Como siempre, J. Lo lució elegante y despampanante: un vestido de Tom Ford con transparencias, el anillo de compromiso que le regaló Ben Affleck y unos aretes de diamantes de Lorraine Schwartz. 

Lopez llegó así al United Palace en Manhattan, muy cerca del Bronx, lugar donde creció. 

En el documental, que estará disponible el 14 de junio en Netflix, cuenta cómo Jennifer se preparó para su famosa presentación del intermedio del Super Bowl junto a la colombiana Shakira. Sin duda, ambas realizaron una de las presentaciones más brillantes de la historia, sin embargo, Jennifer siempre pensó que no había sido una buena idea. ¿Por qué?

"Tenemos seis minutos. Tenemos 30 segundos de una canción, y si nos tomamos un minuto, eso es todo, nos quedan cinco", se le escucha decir a Jennifer Lopez sobre el poco tiempo que tenían de actuación. 

"Tenemos que tener nuestro momento. No va a ser una maldita revista de baile”, agregó.

"Esta es la peor idea del mundo que dos personas actúen en la Super Bowl. Fue la peor idea del mundo", aseguró López, pero no por el hecho de compartir escenario con Shakira, sino por haber elegido a dos grandes estrellas latinas para el show.

Eso no fue todo, Jennifer contó que la actuación de su hija Emme en el escenario corrió peligro. Y es que la cantante consideró que no era solo una oportunidad para brillas, sino también para reafirmar su postura como latina y lanzar un potente mensaje en contra a la política migratoria del presidente de ese entonces: Donald Trump. 

"Para mí era muy importante que mi hija les dijera a todas las niñas del mundo que alcen su voz. Esto no se trata de política, es un asunto de derechos humanos", afirmó. 

"Salimos del ensayo y me di cuenta de que todos estaban asustados, pero no sé por qué. Recibí una llamada de Benny (su representante) y me dijo: 'Quieren quitar las jaulas'. Esa noche, los altos mandos de la NFL lo vieron por primera vez y dijeron: 'Oye, no puedes hacer eso'. A lo que ella contestó: "Sacar las jaulas y sacrificar lo que creo sería como no haber estado nunca allí". Y dijo: 'Benny, no me importa lo que tengas que hacer, no vamos a cambiar el espectáculo. El Super Bowl es mañana y no vamos a cambiar".