Así presume Georgina Rodríguez su nueva vida en Arabia Saudita con Cristiano Ronaldo

Georgina Rodríguez está encantada con su nueva vida en Arabia Saudí. Pasadas solo unas semanas desde su aterrizaje en Riad, una vez confirmado el sonado fichaje de Cristiano Ronaldo por el club Al-Nassr, la modelo ha demostrado que ya se adaptó a su nuevo hogar y, ante todo, que se mantiene fiel a su hábito de compartir con todos los internautas algunas muestras de su lujoso estilo de vida.

De hecho, en su última publicación de Instagram, la también protagonista del reality 'Soy Georgina' aparece elegantemente vestida y presumiendo abiertamente de las piezas de joyería que complementan su look.

Y para reafirmar la decisión que tomó junto a su pareja, con quien tiene cinco hijos, de comenzar una nueva etapa lejos de la élite futbolística europea, la modelo española usó unos versos de la Biblia que exponen claramente su deseo de emprender nuevos retos y salir de su zona de confort.

"Porque no nos ha dado Dios un espíritu de cobardía, sino de poder, de amor y de dominio propio", escribió la también diseñadora haciendo suyas las palabras de la Segunda Epístola a Timoteo, aparentemente su nuevo libro de cabecera.

Su nueva colección de posados consiguió más de tres millones de 'likes', lo que demuestra la capacidad de convocatoria virtual de la que disfruta la joven desde que comenzara su relación sentimental con el astro portugués hace casi siete años.

Tras la grandiosa presentación del futbolista luso como nuevo jugador del Al-Nassr hace una semana, Georgina no tardó en acudir a las redes sociales para expresar su gratitud y la emoción con la que afrontaba la que probablemente sea la recta final de la laureada trayectoria profesional de su pareja.

"Muchas gracias a Arabia Saudí por tan maravilloso recibimiento. Estamos muy emocionados con esta nueva aventura en el Al-Nassr. Estoy especialmente agradecida de ver a Cristiano tan entusiasmado. Siempre juntos con nuestra hermosa familia", escribía al tiempo que compartía un vídeo del evento, en el que no había ni rastro de esos supuestos celos que habría experimentado a cuenta de la familiaridad con la que Cristiano trató a una de las azafatas.