Arnold Schwarzenegger reveló cómo le confesó a su esposa que tuvo un hijo con su ama de llaves

En su documental "Arnold", disponible en Netflix, Arnold Schwarzenegger recordó el día cuando le confesó a su esposa de más de 20 años, Maria Shriver, que le fue infiel con el ama de llaves Mildred Barea, con quien además, tuvo un hijo, el cual decidieron esconder por varios años.

Fue en 2011, un momento que lo cambió todo, cuando Arnold y su esposa, decidieron someterse a una terapia de pareja para salvar su matrimonio. Fue durante una de estas sesiones que el actor de 75 años finalmente confesó su infidelidad con el ama de llaves, Mildred Barea y confirmó que su hijo, Joseph, nacido en 1997, también era suyo.

“Maria y yo íbamos a terapia una vez a la semana. En una de las sesiones el consejero dijo: ‘Creo que hoy Maria quiere ser muy específica sobre algo. Quiere saber si tú eres el padre de José’. Pensé que se me había parado el corazón, y entonces dije la verdad. ‘Sí, María, José es mi hijo’. Ella quedó destrozada por eso”, dijo el actor.

Durante años, Arnold Schwarzenegger admitió haber intentado todo para ocultar la verdad. “Al principio no estaba seguro. Pero a medida que envejecía, más obvio se volvía. Después de eso, la pregunta era cómo ocultarlo”, confiesa Schwarzenegger, quien admitió en una entrevista con el sitio web estadounidense The Hollywood Reporter que la separación fue particularmente difícil de aceptar.

Arnold conoció a su esposa Maria durante un partido de tenis en 1977. La pareja se casó en 1985 y tuvieron cuatro hijos: Katherine (33 años), Christina (31 años), Patrick (29 años) y Christopher de 25 años, quien nació poco antes que Joseph. 

Mildred comenzó a trabajar para la familia Schwarzenneger en 1996 mientras estaba casada con Rogelio Baena. Al principio, tanto Mildred como Arnold creían que Joseph era hijo de Rogelio, pero los genes del roble austríaco hablaron por sí solos.

La ama de llaves se separó de Rogelio y Arnold se encargó tanto de ella como de su hijo, comprándoles una casa en California en el año 2010 y dándoles una vida bastante cómoda. Schwarzenneger aún define esta aventura como “su mayor fracaso”, en el que todos terminaron sufriendo.

La relación entre Arnold y su hijo Joseph ha mejorado mucho con los años; el actor ha hecho hincapié en que incluso en el contexto que se dieron las cosas, está muy feliz de que Joseph sea parte de su familia.