¿Por qué es peligroso cargar y lanzar a los bebés al aire?
¿Qué movimientos no se deben hacer a un bebé? Un pediatra explica por qué hay que evitar este tipo de juegos, de lo contrario, cuáles pueden ser las consecuencias para el bienestar del pequeño
En medio de la ternura y los juegos, pueden darse ciertos movimientos como el cargar y lanzar al bebé hacia arriba o darle vueltas agarrando sus pequeños brazos, los cuales más que causar una que otra risa, puede generar lesiones letales en el menor.
Pero, ¿qué daños puede sufrir un bebé al ser lanzado al aire?
De acuerdo al Dr. Gustavo Rivara, pediatra neonatólogo, no se debe jugar a lanzar a los bebés al aire, ya que los niños pequeños tienen una cabeza muy grande en proporción al cuerpo, por lo que conlleva un serio peligro para su bienestar:
“Significa que los músculos de su cuello no lo pueden sostener. Cada vez que un bebé es lanzado al aire, hay riesgo de lesión del cuello por esta desproporción entre el tamaño de la cabeza y el cuerpo”, explica el especialista.
Asimismo, debido a este tipo de movimientos bruscos y fuertes, los niños llegan a consulta con luxación de los hombros o, por giros fuertes de los brazos, los bebés sufren de fracturas de los codos y las muñecas.
¿Desde qué edad se le puede cargar y realizar este tipo de juegos?
Si bien los bebés empiezan a controlar la cabeza a partir de los seis meses, ya que logran tener mayor fuerza; sigue siendo más grande en relación al cuerpo. Por lo tanto, el Dr. Rivara recomienda que, durante el primer año de vida, se evite por completo.
“(Incluso) en los primeros dos años se debe evitar hacerlo, pero (después) quién lanza a un niño de dos años cuando tiene más de 12 kilos. Dejemos de lado los juegos bruscos, toscos”, agrega el pediatra.
Por ello, la recomendación profesional es simple, es mejor jugar con afecto y ternura, pero también delicadeza, más aún si son pequeños menores de dos años y gran parte de su cuerpo sigue en formación.