¿Por qué cada vez hay más casos de autismo en niños?
Médico pediatra expone los factores de riesgo para el autismo en niños y cuáles son las causas potenciales ligadas al embarazo y otras condiciones
El trastorno del espectro autista (TEA) es una afección del neurodesarrollo que presenta ciertas alteraciones en la comunicación, interacción social y otras características. Si bien es una condición compleja; a través de los años e investigación, sus causas se han relacionado con influencias genéticas, medioambientales, sociales e incluso por factores que vienen desde el embarazo.
El aumento de casos de autismo y otras condiciones en niños
Para el Dr. Jimmy Borja, médico pediatra, solo un 20% de los casos de autismo diagnosticado en niños tiene implicancias genéticas; sin embargo, diversos estudios apuntan que el incremento se debe a los cambios en el estilo de vida en los últimos años.
“La especie humana y su biología es la misma desde hace 100 000 años, pero la vida ha cambiado mucho, por lo menos en los últimos 20 años. ¿Nuestro cerebro está preparado para ello?”, comenta en este video.
El especialista explica que en la década de los 90s, la incidencia estaba en alrededor de un caso por cada 2 500 niños. “Actualmente la incidencia va alrededor de un caso por cada 54 niños, según estudios realizados en los Estados Unidos”, agrega.
La reciente pandemia global también ha llevado a que existan diversos cambios en la sociedad. Hoy en día, no solo se observan más casos de autismo infantil, sino de trastornos de hiperactividad, déficit de atención y otros problemas neurológicos en la infancia.
Estrés crónico durante el embarazo como una potencial causa de autismo infantil
Según el Dr. Borja, la base de la alta incidencia de autismo en la sociedad es el estrés durante el embarazo, el cual puede estar vinculado a un caso no deseado o planificado y altas carencias emocionales o afectivas durante la gestación y post nacimiento, lo que afecta el neurodesarrollo del niño.
“Nuestra sociedad está sometida a un estrés constante. Estrés que lleva al organismo a producir en forma excesiva el cortisol como mecanismo de supervivencia. Esto afecta al feto y al niño pequeño, una etapa crucial de su desarrollo neurológico”, indica el especialista.
Es por ello que el doctor sustenta que el TEA puede ser prevenible si una madre tiene un buen embarazo y en ese rol también es importante la conducta de la pareja, quien debe acompañar a la madre y el bebé en la gestación.
Otras posibles causas de autismo estudiados en los últimos años
Vinculado con el estrés durante el embarazo, también se ha visto un incremento de casos de autismo en hijos de mujeres que durante su gestación atravesaron un contexto de catástrofes (terremotos, huracanes, etc.), así como también guerras y conflictos bélicos.
Post nacimiento del niño, también se encuentra el factor de situación de “abandono”, por ejemplo, en el gran número de infantes que desde muy temprana edad van a una guardería o son cuidados por terceras personas en apoyo a la madre.
“Esta situación causa un profundo estrés y una ansiedad profunda en el niño, lo que obliga a su cuerpo a producir cortisol como mecanismo de supervivencia que va a afectar su desarrollo neurológico en definitiva”, indica el Dr. Borja.
Otra potencial causa de TEA se observa en los niños nacidos prematuramente, quienes tienen un mayor riesgo de desarrollar problemas psicológicos y psiquiátricos.
El médico pediatra señala también como factores de riesgos potenciales a los embarazos por fertilización in vitro, la postergación de la maternidad después de los 35 años, el aumento de nacimientos por cesáreas y una disminución de la lactancia materna exclusiva.