COVID-19: ¿Qué se sabe sobre la combinación de vacunas?
¿En qué países se ha permitido la combinación de vacunas? ¿Qué tipo de vacunas se usa en estas medidas? El Dr. Elmer Huerta responde estas interrogantes
Muchas personas se preguntan si es efectivo y seguro combinar las vacunas contra la COVID-19. Hasta el momento, se conocen diversas medidas que ya se aplican alrededor del mundo, con el fin de completar el esquema de vacunación en una población.
El Dr. Elmer Huerta indica que cuando hablamos de una "mezcla" de vacunas, hay que ser muy específicos porque podrían haber múltiples combinaciones, pero necesitan siempre un respaldo científico.
¿En qué países se ha permitido la combinación de vacunas contra la COVID-19?
La primera medida, aprobada científicamente y con estudios publicados en revistas médicas, se trata de la combinación de una dosis de la vacuna de AstraZeneca con una segunda dosis de la vacuna de Pfizer.
Sobre esta combinación, se demostró que no genera efectos secundarios adversos y es muy eficaz en generar anticuerpos. Reino Unido, Canadá, Estados Unidos, España, Suecia y Emiratos Árabes Unidos son algunos países que permiten este tipo de inmunización.
Asimismo, el Dr. Huerta menciona el caso de Europa a comienzos de año. A raíz de los problemas de coágulos, se suspendió la vacunación con AstraZeneca y muchos quedaron con una sola dosis. Tras varios estudios, se determinó que una dosis de Moderna podía aplicarse como segunda dosis.
En la región, Argentina quedó desabastecida de segundas dosis de Sputnik V y millones de argentinos se quedaron con la dosis inicial. Tras poner en marcha una serie de investigaciones, se decidió que una dosis de AstraZeneca o Moderna completaría el esquema.
Lo incierto de la “automedicación” de vacunas
El Dr. Huerta señala que se vienen realizando investigaciones en torno a la vacuna rusa Gamaleya en relación con Pfizer, así como con Sinopharm y Sinovac. Pero, aún no se publican resultados concretos.
Reforzar el esquema de Sinopharm o Johnson & Johnson con dosis de Pfizer o Moderna, no tiene aún ningún respaldo científico, por ejemplo.
“Esas son, digamos, maneras de automedicación no avaladas por la ciencia. No les ha pasado nada, dicen. (Pero) no sabemos si funciona o no. De tal modo que es difícil aconsejar a esas personas, decirles si están haciendo bien o no”, señala.