Papa Francisco hace un llamado a la paz en Corea y Kim Jong-un lo recibe con misiles
El Sumo Pontífice llegó a Corea del Sur y se reunió con la presidenta surcoreana, Park Geun-hye para pedir la reconciliación de ambas naciones.
El papa Francisco animó hoy a las dos Coreas a "buscar la paz" y "derribar los muros de la desconfianza" durante una ceremonia en el palacio presidencial de Seúl, donde el pontífice llegó hoy para una visita de cinco días a Corea del Sur.
"La búsqueda de la paz por parte de Corea es una causa que nos preocupa especialmente, porque afecta a la estabilidad de toda la región y de todo el mundo, cansado de guerras", aseguró Francisco.
El pontífice, que se reunió tras su llegada con la presidenta surcoreana, Park Geun-hye, recordó que la Península de Corea "es una tierra que ha sufrido durante mucho tiempo la ausencia de paz" e hizo un llamamiento a "derribar los muros de la desconfianza y del odio promoviendo una cultura de la reconciliación y de solidaridad".
El papa pasea por Corea del Sur.
(Foto: El Nacional)
Corea del sur espera la reconciliación
"Los coreanos creemos que el dolor de las Coreas puede curarse con su visita y esperamos que ésta nos lleve a la reconciliación", expresó la presidenta surcoreana, Park Geun-hye, en palabras dirigidas a Jorge Mario Bergoglio.
(Foto: RT)
Francisco participará el sábado en la beatificación de 124 mártires surcoreanos en la emblemática plaza de Gwanghwamun de la capital, en un evento que puede atraer hasta un millón de personas, según estimaciones de las autoridades.
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Misiles de bienvenida
Para recibir al papa y a su mensaje de paz, Corea del Norte no tuvo mejor idea que lanzar cinco misiles de corto alcance al mar que recorrieron una distancia de 220 kilómetros, informó el Estado Mayor de Corea del Sur.
El presidente de Corea del Norte, Kim Jong-un junto a sus generales.
(Foto: @anaJuliaMena)
En lo que va de año, el régimen comunista de Corea del Norte ha lanzado al mar un número inusualmente elevado de misiles en protesta por los simulacros anuales que Corea del Sur realiza en territorio surcoreano junto a tropas de Estados Unidos.